99 Veces de Frasco Revela Tu Infidelidad
con Valeria resonaban en mi cabeza: "Es una fuente inagotable de ideas para él". La rabia me di
"santuario" para trabajar, un lugar donde necesitaba silencio absoluto. Siempre estaba cerrado con llave. Per
a Luis. Me deslicé fuera del baño, envuelta en una bata, y fui directamente a la bib
y dentro, la pequ
des grises, muebles modernos, ni un papel fuera de lugar. Parecía el santuario d
bía. Ingenuamente, él me la había dicho una vez, diciendo que era la fecha de nuestro anive
1. La puerta de la caja fuert
sa o dinero en efectivo. Había una caja de
razón s
n un campamento de verano. Un boleto de cine arrugado de la primera película que vieron juntos. Una medalla de na
rito a Luis a lo largo de los años. La mayoría no habían sido enviadas. Sus ca
ón, de una envidia que se disfrazaba de devoción. Hablaba de cómo Luis m
ma, donde perteneces. Incluso si eso
demás. E
da diseño que yo había creado con tanto esfuerzo, cada noche en vela, cada gota de sudor y cada lágrima d
última carta, la que
tipo de papel que se usa para las oc
más. Te he amado desde que tengo memoria. Mi vida solo tiene sentido si es a tu
boceto. Un boceto detallado
illo de c
mismo grabado. El anillo que llevab
Era una sustituta. Un premio de consolación. La segunda opción para un co
el mundo derrumbándose a mi alrededor. Pero el dolor, por intens
. Cada carta, cada foto, cada documento que probara la transfer
mo estaba, cerré la caja fuerte y colgué el cuadro.
ar de nuevo, pero esta vez no era para tomar fotos. Busqué en
r a la oficina de Londres. Es urgente. Necesito al mejor
línea, escuché a Ricardo
mor? ¿Todo bi
ud, ya no me provocaba nada. Ni dol
ardo", respondí, mi
entró al bañ
os. La empresa, bueno, ya se estabilizará. Quizá
a la bañera, su r
s hora de tener
Un hijo. Otra cadena para atarme a é
sonrisa que no
icardo. Quizás es hora
el que él no