Los Asistentes De Cupido

evo y diferente al qu

ITU

ecinto del amor, ese que

do a otro contemplando s

ba sobre

nte con una forma ovalada

aroma, no era hostigarte

usaba esa

eva combinación Amor Et

mpo, quería que las person

esta y e

porque en su próxima vi

el Amor ni tampoco tend

lo funcionaba

es que se llevaba demas

de cupido sin decir qu

e había utilizado podía c

A

to más por su oficina y

ilizaría en almas que haig

s y que el Amor en ellos

quinientos años y no má

que el Amor no duraba p

r de crear Amor y más Amo

ón y creación seria len

sistentes de lo nuevo qu

do con Adara y se detuvo

sería terrible, con esta p

l dolor eterno, ya no pod

os por el rec

ión entre sus manos y vol

ue fuera rociado seria in

rumpir en esto era que desc

que robarla, él no permiti

or en e

de nuevo su viaje a la tie

o a sus asistentes que le

nde el amor e

padas ni arcos con flecha

en carrozas que eran arr

hablar de los hombres los cuales usaban abrigos,

gan

ellos, se veía tan el

vaba un abrigo negro tal

de que se veía joven él sa

unta y brillaban de lo limp

ste galán, sonreía como

aracter

e la ciudad que no conocí

s enam

amilias con dinero, las do

ellos dos habían log

que se encontraban senta

dos jóvenes enamorados—c

La muchacha se sonrojo un

sta—.Y para personas co

de buena

o saco la hermosa botell

ve

solo son patrañas?-pr

la mano d

su pregunta, aun mante

esta botella la cual es e

zos, pueden olerla y s

tre si y asintieron con a

ia primero en el brazo del

de la

a sentirse en el ambiente,

la sensación que les caus

era tal producto per

ría de aquel lugar, a pesa

abían aparecido marcas q

ferencia de los demás, era

sería solo visible para ell

o Cu

ito diferentes personas y

los destinados, no solo era

s protegía de la

Cupido volvió a pedir una

do fuera a esparcirl

po creando pero su resul

te millones de años cup

asistentes no sabían

ocha

enzaba a sospechar que

car a algunos humanos, apa

aroma de

cubrir los planes de su

los humanos no merecían e

r que ella ca

s en la soledad, en el

s a los que podía llegar

n su poción no los dañaba

a ese monstruo

usando desprecio