El Diablo y Mi Corazón Roto
ía convertido en el perfume de mi vida durante los últimos seis meses, el aire era pesad
os de veinti
el nombre de Diego "El Diablo" dejara de ser sinónimo de empresario
mana,
e de recortes de periódico, notas adhesivas y mapas con círculos rojos, su muerte no fue un "ajus
ato, y yo iba
a, mostrando un número bloquea
?", respondí
ica ancla en este infierno. "El Diablo movió una gran cantidad de dinero anoche, y el Comandant
mí
almaditas en la espalda en el funeral de Sofía, prometien
egunté, mientras mis dedos volaban so
"Algo sobre 'cerrar el caso', 'pist
La periodi
mi decisión tomada en un instante.
, advirtió El Zorro. "
que ir ahora", insis
que pudiera in
la de contaminación y vida que de alguna manera me hizo sentir más despierta, la comisaría estaba a solo unas cuadras,
n alto, ignorando las miradas de los oficiales, encontré a Ramír
salió mal, y que la familia reciba la notificación oficia
del caso de Sofía, estaban cerránd
llamé, mi voz sonando más
a apenas visible detrás de u
fingiendo recordar mi nombre
mirándolo directamente a los ojos. "Me llegó información de q
blo" hizo que su mandíbula se te
río. "No tenemos ninguna evidencia que vincule al señor Garmendia con n
una frialdad que me
ndo una ola de ira. "Fue un asesin
, mi voz bajando a
involucrado, sé que
dra, me miró, y por primera vez, vi algo má
ido. "La Ciudad de México puede ser un lugar muy peligroso para las periodistas que hacen dem
no fue solo una amen
l pasillo, temblando no de miedo, sino de una rabia pur
ra, y yo acababa de re
precio, y yo estaba