Sofía: La Farsa Familiar
iente era m
diecio
ado, me compré un pastelito indivi
n poco chueco,
na velita que encontré
ojos y ped
odo fuera u
me abrazarían, que Mariana
la v
vaneció y todo
ntré de nuevo al fo
os apareciero
ndose su propio pas
familia no se v
ños de Mariana también, le están organi
e detuvo por
yo éramo
e hoy también e
leto, o quizás, mi cerebro
deo apareci
cuenta d
ectacular en u
ecenas de jóvenes vest
, abrazando a Mariana, quien so
con una alegría que yo jamá
e acord
aje, ni un
la tristeza
r y salí de ese
ónde iba, so
había visto en uno de los foros,
re
jardín perfectamente cuidado y c
fiesta llegaba
en la acera de enfren
la puert
baleándose un poco,
vie
se borró de
ofía?" , preguntó mi
a verlos"
madre, sin acercarse. "Estamos ocu
mpleaños" , susurr
oltó una r
No digas mamadas, Sofía. Tú estás en el programa de 'cr
ños" , repetí, sin pode
te, Mari
rojo era de
se contrajo en u
a arruinar mi fiesta! ¡Mi
jeans viejos y una
miró con d
Deberías irte, Sofía.
ntro de mí se rom
zo de pastel" , dije,
tó una carc
ír. Las ratas como tú comen ba
garró del bra
árgate de aquí ahora mismo
tanta fuerza q
aspó contra
ntarme, Mariana se acercó
de su pastel, a
dijo con desprecio. "Ahora lárgate
on de nuevo a la casa, cerra
olvieron a sonar, como
la acera, mirando el pas
ejillas, mezclándose con el po
da la humillación y toda la rabia
deci
aca
a a ser
a llorar
r cada lágrima, por cada g
ujos y mentiras, así como el