Orquídea Robada, Amor Traicionado
, mientras Juan se mantenía a una distancia respetuosa. El zumbido en sus oídos era ensordecedor. Repasaba la escena una y otra vez:
Juan finalmente, pasándole una b
temblaban. "Diez años, Juan. D
merece, Ricky.
n. No era solo la infidelidad. Era la mentira, el robo, la humillación pública. Era el hecho de que ella lo ha
aba enfrentarla en su propio territorio, lejos de los ojos curiosos. Necesitaba una explicació
ofía estaba en la sala, sentada en el sofá, con los ojos hinchados de llorar. Pero
Ricky, su voz sonaba hueca en
pondió ella, sin mirarlo. "Ya me
ue yo te humillé? ¡Tú robaste una orquíde
ella. "¿Quieres que l
gritó Ricky, perdiendo el control. "¡Quiero que me mi
n sus ojos no había arrepentimie
a mediocre, de este departamentito, de contar cada peso. Alejandro me
i lo hubieran abofeteado. Su trabajo honesto, su d
dinero", dijo él, con un
la con desdén. "Es todo. Eres p
a entrado a ese departamento ya no existía. La venda había caído de sus ojos, y lo que
Las palabras salieron con una fi
me voy a quedar con el departamento. Y con la mitad de tus ahorr
cky solo pudo negar con la cabeza. Estaba discutiendo con una pers
dijo él, con voz gélida. "No te daré
y largarse de ese lugar que ya no se sentía como u
de Sofía en la sala, melosa y baja. Pensó que quizás estaba
o destrozó
en el sofá, el mismo sofá donde Ricky y Sofía habían visto tantas películas juntos. Tenía a
jandro. "Yo me encargo de todo. Ese ja
ñalada final. No era solo una aventura. Eran una pareja. Y él, Ric
, cerró la puerta de la habitación, tomó su maleta y salió del departamento por la puerta de servicio, como
ina y feliz, flotó desde el departamento. Y en ese momento, Ricky supo que