Luchando Por Mis Hijos
intenté. Mi voz salió como un gemido ahogado, lleno de lágrimas y
rreas que me sujetaban. Quería arañarlo, golpearlo, hacerle
Su rostro era una másc
ión es tuy
có a él y se acurrucó en su costado, lanzándome una
icientemente alto para que yo la oyera. "Déjala que se
el eco de sus crueles palabras. La anestesia finalmente me venció,
fusión. Sentía un vacío horrible en mi vientre y un corte que ardía
is hijos?" pregunté a una en
Tranquila, señora. Los bebés est
esfuerzo sobrehumano, estiré el brazo, cada centímetro un universo de dolor. Mis d
, Isabella. Ella siempre me había quer
Bue
, Sofía," susurré,
Alejandro me dijo que estabas en el
rimas corriendo por mis sienes. "Alejandro... quie
ado de la línea, seguido d
lo estaba manipulando! No te preocupes, Sofía. Voy par
sabella irrumpió en mi habitación como un torbellin
?" preguntó s
cubadora,"
ea de neonatos. Regresó unos minutos
os bebés. ¡Y no hay médicos! Llamé a tu doctor, al mejor neonatólogo de la ciudad, ¡y me dicen que Alejan
nsado en todo. Nos había encerrado en su ja