La Sustituta de Nadie
ón secreta que hoy, en mi cumpleaños, e
Mateo, decir que yo solo era "cómoda", una "sustituta"
te a todos, él me empujó, dejándome caer y torcerme el tobillo, mi
na sombra, hasta el punto de que, con 39 grados de fiebre, me dejó en
udio, entendí todo: fui una idiota, ciega, entregando seis años de mi vida a un fantasma. Marcando el númer