LOBO DIABLO
d de los miembros fuera, estos no disimularon su curiosidad cuando me vieron llegar con semejante adorno en los brazos, no me i
sería su nombre? ¿Cómo reaccionara cuándo me entierre en ella?, debía dejar de perturbarme con preguntas que su cuerpo me respondería pronto. Me gire y entre al baño, después de una larga ducha mi cuerpo estaba más relajado, pero la tensi
eans azul, un polo claro, tenis a juego....a to
as me miraron al unisono cuando entre, no murmuraron nada, sabían a la la perfección que podía escucharlas, solo me siguieron con la mirada hasta sentarme en el comedor, Sofía se apresuró, m
nueva adquisición. Aunque eran chismosas, no dejaban de
r que traje? uhhh...-Les pregunt
e la primera
rla, es solo eso.-Resoplo, girando lueg
llevaré, por hoy dormirá en mi, habitación, es
do la vimos, perdóname, era inevitable no hacerlo. -Excla
cárguense de ella hasta mi regreso. -Respondí para enseguida
la primera en acercarse a mi, la bese, es una delic
ta humana.-Sharon escupió esas palabras con amargura, sus ojos centellaban de furia.Le había soportado bastante impertine
ostro para que entendiera todo lo que le podía
r.-Le grite para luego lanzarla al piso y ordenarle a
speraron mucho para correr sumisas acariciarme, como abejas hacia
su garganta, por un momento pensé ver el rostro de la monja; estaba volviéndome loco pensé; más cuando la embestí ferozmente, inclin
ngélic
l cruce de una zona prohibida, comenzó a retorcerse, quiso ver su rostro, cuando un hormigueo acalambrado se adueñó de su femineidad, producido por el juguete o de su len
n un brusco
? -mire hacia
n lujoso, quien ¿me habrá traído aquí? Pensé mientras se levantaba de la cama para abrir una puerta que resultó tener detrás el baño, igual de grande y pomposo que la habitación ...seguía
de unos 50 años, regordeta, de rostro amigable, apareció en el umb
mida, espero que hayas descansado bien.-Expre
¿puedo preguntarl
a me desmaye, no recuerdo más nada.-Dije tratando de encontrar respuestas, no vi asombro en su rostro, algo que me ex
podrás conocer, ahora come algo. -Dic
do, para mí asombro eran de la talla correcta. También me entrego artículos de higiene, dude en
ezas de ropa, no eran mi estilo, enseñaban demasiada piel, al final me decidí por un vertido azul turquesa, algo ajustado para mi, pero por lo menos llegaba hasta las rodillas, desee recogerme el pelo, pero al final decidí llevarlo suelto, me gusto ver mi aspecto en el espejo, lo admi
varios minutos después seguía caminando en círculos, nadie se me acercaba, trate de acercarme alguno y huyeron ¿a qué le temen? ni que apestara...ya cansada decidí volver a la casa, cuando caminaba en su dirección, perdí la noc
pciones eróticas de Ana me habían perturbado tanto