Perdón imposible: Enredada con el tío de mi ex
de un tono de fastidio, contrastando
os por un fugaz momento antes de relajar
aferrándose a su prometido, con sus
fuerte jadeo, se tambaleó hacia atrás, tropezando torpemente con la esquina
artarla; en su lugar, la suje
on una voz llena de dulzu
se clavó en el corazón de Madison; en ese momento, la necesidad de pr
ten realmente sintiera algo por ella, ha
saje contundente: no existía c
el hombre, frunciendo el ceño mientras sus ojos se dirigían a la piern
a risa vacía y ca
muy ocupado, absorto en su
e, Madison respiró hondo y dijo:
en un silencio sofocante y
e! ¿En serio vas a hacer esto ahora, justo antes de la cena familiar? ¿De verdad
se hacía la idea de que su promet
seguro de que Madison era la única que a
a familia Dixon o a sus intentos de acaparar toda su atención; no podía comprender cómo algui
destilaba una dulzura fingida: "¿Te refieres al contrato que tiraste a la basura hace poco? Cuando lo mencionaste, me in
suavizando deliberadamente sus rasgos mientras continuaba: "
lfred eran como hermanos; sus fortunas estaban en
los Pearson continuó creciendo exponencialmente; en consecuencia, los Dixon ahora se aferraban al co
ecio que Lana mostró y simplemente dejó que una leve sonri
blaré con mi hermano sobre el contrato y me aseguraré de que deje de molestarte. Cuando el compromiso
lo más serena posible; en caso de que llegaran a
el costoso bolígrafo que sostenía perforó con fuerza el contrato, provocando que la tinta
: "Haré que redacten un nuevo contrato. En el banquete de esta noche, confirmaré que
desilusión comenzó a
posición dentro del Grupo Pearson, así como creía que ella lo nece
ro acuerdo estratégico, carent
manera desafiante, ella
avesaron a Madison mientras esta se daba la
r su alegría, logró forzar una expresión triste. "Lo siento mucho
aba de él como el calor
pondió con un tono cortante y gélido: "Tú no tienes la culpa. ¡
adison disfrutaba de la cálida luz del sol, mientr
ia dictaminó el rumbo de su vida, uniendo su c
igó minuciosamente qué le gustaba y qué detestaba, camb
ison abandonó su preciada motocicleta, reprimió su naturaleza enérgica y comenzó a usar
r dignidad y aplomo; por lo tanto, la chica dominó el arte de la etiqueta, perfecc
ara complacer a Colten, olvidándose lentamente de
ba en el taller de motocicletas, mezclándose
izó para comprar una motocicleta de tono rojo escarlata vibra
e había convertido en un placer olvi
senderos en la montaña ubicada en la zona este de la ciudad; la velocidad
ra lanzar un grito victorioso hacia la inmensidad resonan
, comentó una voz con un matiz de familiaridad, tomá
de la cintura. Luego, la misma voz susurr
su rostro se ensombreció con una me
r Pear
antes de meterla suavemente en su bolsillo, mirándo
ción de la desesperación, pero ese día, después de visitar