MILAGRO DE AMOR
Punto d
ía continuaba fuera cuando en pocos minutos tenía programada una videollamada con un distribuidor europeo. No era propio de él llegar tarde o hacer cosas de última hora.
jefa de Torrens Incorporated, Margare
urre? -p
que cerrar este negocio hoy -dije, revisando mis archivos por enésima vez para
los hermanos que trabajan. -Puso los ojos en blanco y supe que estaba pensando en Noé, el único hermano al que n
unquePerseo y Carter eran grandes activos, en mi opinión Albert era más capaz de mantener la vista en
parecían llevarse bien, pero seguía pareciendo que debía de haber alguien al mando-. Por cierto -añadió, posando
r
lo hayan creído. -S
desca
cina, moviendo la cabeza hacia
man -dijo Andi. Re
lamada im
teoría de que necesita echar un polvo. -A
el mundo necesit
iendo mi
teligente. Debería tener novias a patadas, pero en cambio trabaja
cabeza. No necesito entrar y estar pensble. -Di la vuelta a mi escritorio p
veo
se marchó a
notas y archivos listos. Puse los míos al lado de los suyos, dispuesta a o
preguntó mientras echaba un vistazo a l
reloj-. Debería llamar en
cuota de mercado de cada
ido. También tengo información sobre nuestros competidores allí e hice quePerseo elaborara una lista de ventajas de nuestros productos sobre los de ellos.
t me
MA
-. El punto es atraerlo a aceptar el tr
ía razón. Era guapo. Tenía toda la pinta de ser un playboy multimi
en tu trabajo,
que reconocier
, señor
ara que eso suceda. La ventana de oportunidades se está cer
enía tanto como él. Sabía que hoy era, a
a para ayudar. -El ord
o, pulsando el ratón para
un hombre que disfrutaba de la vida. O tal vez era solo su aspecto europeo. Mientras que la corbata de Albert estaba bien ajustada, el señor Amer Len no se molestaba en llevar una y en su lugar llevaba la camisa c
-El acento francés del señor
ame Albert. Me v
brar un trato con algo de vino y quizás
z era solo del señor.Amer Len, pero era bastante franco sobre los muchos aspectos sensuales de la
eo que mi asistente te envió todos los detalles de n
recen bastant
endió la mano y le pasé el contrato que habíamos
... er... Albert. Mis preocupaciones
su rostro impasible, pero pude ver cómo la
ciones, sino sobre
retó la m
brillar. Tras haber hecho mi investigación sobreAmer Len, me pregunté si su preocupación era menos sobre la estabilidad de la empresa.Amer Len heredó el negocio de su padre, quien lo heredó del suyo, y así suc
yudar a
la abuela del señor Torrens. Incluso cuando ella se prepara para jubilarse, sus cuatro niet
pó que tal vez me hubiera exce
r que preferimos trabajar con empresas familiares. Ofrecen estabilidad y un legado que cada generación quiere proteger. Sin emba
pués de todo, Albert solo tenía
el negocio de mi fa
ue los cuatro hermanos disuelvan la empresa o la vendan? Podrían ir cada uno po
ro supuse que estaba pensando que con esposas y familias los hermanos Torre
u cabeza. Ni él ni sus hermanos tenían perspectivas de matrimonio, que yo supiera. Su padre era viudo, p
iar de la empresa termine con mi generación. Tengo t
Amer Len
hijos, a no ser qu
los tengo -a
echo, mi investigación su
imaginé que para Albert seguía siendo espeluznante saber que el señor
do con mi empresa. Eso
estaba convencido. Albert me miró. Sonreí, e
n y bueno... nos hemos comprometido recient
este hombre, ¿cómo no sabía que estaba viendo a alguien? ¿Y que se habí
amelo -dijo el
Albert-. Supongo que fueron todas l
stado trabajando muchas horas aparte de mí. La mirada del señ
e estás comprometid
Q
cubrió la mía so
n la señora... Amelia y yo