Nos volveremos a encontrar

de la habitación antes de cerrar la puerta lo único que pudo decir, respetaré la

mos meses han sido maravillosos aunque no la amaba había sido muy bueno con ella solo de pensar que ya no iba a seguir viéndolo sentía un dolor en el corazón aún

n que había tomado, al mirarse al espejo se preguntaba así mismo por que sentía que su corazón se estaba quedando vacío pensando si ya se había enamorado de ella o simplemente es por la costumbre de q

ero que te quedes conmigo por el resto de la semana y después puedo dejarte ir, ella lo miraba sin saber por qué quería que se quedara unos días más, melisa no pudo contener la duda y pregunto, por que quieres que me quede sabes que entre los dos no existe nada más que un acuerdo he

a susurrarle al oído de que ella nunca se había subido a un caballo, con la mirada maliciosa dijo que no se preocupara que estará bien siempre que esté a su lado, pero no estaba convencido de intentarlo, al mirarla pensé sintió cu

spués de un rato mark se abalanzó hacia ella la tomo entre sus brazos y comenzó a besarla su beso fue correspondido, la miraba y no dejaba de mirar lo hermosa que era, mark se escuchó la v

ano para ayudarla a levantarse y regresaron a la hacienda, acostada en la cama melisa no podía dejar de pensar en lo maravilloso que fue este d

a besarla, al sentir los besos en su cuello melisa abrio los ojos y lo miro con amor, la abrazo fuertemente llevándola hacia el, esa noche los dos se entregaron, él la hizo suya, mientras ella se entregaba por completo a él, los gemidos de melisa lo hacían excitarse más

mbre que se encontraba totalmente dormido, una lágrima rodaba por su mejilla sentía que amaba a este hombre pero el no tenía lo mismo por ella pensando cual es la

al mirar un carta dirigida para él la tomo y comenzó a leerla, mark me marchó no puedo seguir a tu lado realmente me enamoré de ti pero sabiendo que tu no sientes lo mismo por mi decidí marcharme antes de lo acordado, si tome esta decisión es por miedo a que después no tenga el valor de hacerlo, te deseo lo mejor y que algún día encu

corazón, pensando como melisa pudo salir a altas horas de la noche, la hacienda se encontraba muy retirado de la ciudad era muy extraño que pasara algún auto por ahí perdido en su pensamiento fue interrumpido por marta que tocó a su puerta, adelante al e