Matrimonio por contrato con mi jefe
ex
ue mandar a eliminar el anuncio. Eran demasiadas solicitudes, y enci
para observarme con
arazada? –so
s revisaba algunas candidatas, p
la regla ¿verdad? –preguntó curiosa, mientras acomodaba sus buc
soy virgen... -susurré averg
sarnos es... alguna salga embarazad
ese problema –respondí burlona, con un dejo de tris
. te hace falta unos arreglitos ¡T
ponía de pie y tras dar un su
r las caderas, estallé en carcajadas. Brianna era todo lo contrario a mí, pero así
vertido, mientras me robaba
Brianna no era mi hermana, pero parecía una. Éramos amigos desde pequeñas, y s
bligó a sentarme frente al espejo. Hice una mueca, en cuanto desató mi cabello siempre amarrado a
os tantos cursos. Ella trabajaba de cualquier cosa, y le encantaba aprender. Me gustaría s
jos mientras peinaba mi cabello. Luego, co
me había maquillado. Incluso tenía lentes de color, don
un chico con el que salgo, y
pre q
petó con alegría y
ieran cantado en mi oído ¡Encontr
le daba un abrazo, y salía de la
go a la candid
los rostros. Incluso cuando nos hemos cruzado en el centro comercial, no me reconoce. Al principio pen
ría cuarenta mil dólares, y además era solamen
aba que fuera bonita solamente para tener sexo y nada más. Nunca se había sentido involu
. Las puertas fueron abiertas, y el hombre envuelto en un impecable traje de color azul, avanzó. Sus ojos azules,
rmosa, con ojos azules más claros que él, y un cuerpo precioso. Aunque algo delg
sus ojos sobre la "escultura", respondió su miembro enseguida.
frenaba. Sentir la boca de su jefe, era aún, más raro. Lionel, colocó su pierna derecha entre los glúteos d
sin verlo venir por ella misma
gilancia con los ojos llenos de furia. Sin pestañear, la empujó contra la pared, y su mano
a su rostro, y ella se acercó a
ye
ara que se marchara. -¡Ahora! –gritó y ella dio un
il y triste. ¿Por qué lo había golpeado? Está bien. Él le había dado un beso,
un sentia el calor de la cachetada en su mejilla, y sin poder evitarlo le dio una patada
edor de su pene. –Oh... -gimió mientras sus pliegues se contraían de arriba abajo. Su palma, comenzó a humedecerse por sus propios fluidos. Se masturbaba y presiona
enirse, y dejar una mancha sobre la