Todo por tí

gió la palabra ni me dio una explicación. Sencillamente

con extrañeza hasta observar a su portador. El chico me observa

malo _

Niego y hago a

de él, mi hermano besa a Monica mientras esta

ue había presenciado esa noche, me prohibió decir cualquier cosa en contra de Monica. Esa fue la p

llevo a mis labios, el olor a alcohol impacta mi nariz. Aun así, dejo que su líquido pase por mis labios y se adentren

hico aparta el vaso alejándolo de

no bebedora alcohol? _ replico limpia

arlo _. Sé a lo que se ref

ndo por contener las lágrimas, pero no

, para sert

co frente a mí _. No se supone que deberías re

ble verdad que un

e amable lo que

lo que él responde con un giño llevando su vaso hacia sus la

_. Se gira dándome la e

_ rectifico cruz

... Luz _. Y con una sonrisa de burla, se marcha

aneta gira y gira al igual que muestras vidas, y que en algún moment

o somos consciente de ello hasta que hemos llegado. Yo no soy co

es mi punto de partida

una pequeña remolona. Soy de esas que ponen quince alar

estudiante para ser una doctora c

errar bien la puerta. Vivimos en un barrio tranquilo, pero si hay algo que he aprendido tras varias noches en mi traba

pico, los claxon suenan debido a los conductores impaciente que de man

s después del mío que ya ha pregonado a los cuatro vientos lo estúpidos que somos los de adela

ciera que el at

do evitar mirarlas sin poder dar un paso. Esta será mi primera entrada oficial como doctora. Y eso me asusta, ya no más de tener a mis me

os casos si lo necesito, pero al final del día la responsab

é, eso es una mierda _. La sonrisa de Jarol se amplía al ver mi expresión de fasti

mi mejilla para luego envolverme en un abrazo _. Ya

interrogación, creo que si estuviéramos en un

ayuda _ r

ol extiende un brazo pasándolo por mis hombros

sus ojos negros son toda una atracción. Pero es como un chicle, una vez que lo pisas, no

e mascar, es su pequeña adición, según ella, siempre tiene que tener algo en la boca. A Jarol

straba osca las pocas veces que les hablaba, pero, aun así, nunca se rindieron. Todas las mañanas sus sonrisas junto con sus discusione