Por favor, sigue finguiendo.
de sutura en la mano izquierda, que había tomado un vuelo directo a Hong Kong tras salir del médico y que regresaría justo a tiempo para asistir a la gala esa noche. Harper no sabía si e
scubrió que prefería estar allí en lugar del piso principal. Los espacios eran amplios sin llegar a ser tan imponentes como en la
lo ocurrido. La amargura aún le pesaba; no podía olvidar la ira en los ojos de Leonel y la indiferenci
con atención, sus manos trabajando en la enci
fría de Leonel y la forma en la que la había dejado a un lado. Alice era por mucho la única figura materna que había ten
nel no siempre había sido así. Podía parecer una persona inalcanzable y distante, pero Alice había visto otros lados de él. Mientras escuchaba, juntó la
on la mirada perdi
el, estaba de vuelta en la ciudad. A juzgar por la forma en la que habían
lo suficiente para ha
preguntó
ce, sin levantar la vista del sartén. Aunque su tono era casual, el comentario parec
tiendo que el nombre le res
e rompió su compromiso y se fue a Corea?
volver -añadió, encogiéndose de hombros. Pero en su mirada se reflejaba una chispa de intriga que n
es de que Harper pudiera responder fue interrumpida por una lla
ody-, solo quería confirmar su disponibilidad es
papel, pero las implicaciones iban mucho más allá de una simple firma. Su actual condición de "esposa" del único socio fundador vivo, y
en la que tendría que seguir fingiendo. -Claro, gracias por llam
por lo que Don pasará por usted a las 7:30 y luego ir
jos al escuchar l
Melody. Es
señora Manzuri. Su esposo me pidió que
ón mientras escuchaba a Mel
ice: "No volv
monio. ¿De verdad creía que un simple comentario a través de su secretaria era la manera adecuada de disculparse? Al colgar, Harper no pudo evitar
interrumpida también, pero Harper no. Odiaba la forma en qu
- respondió, con un tono mordaz antes de salir,