icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Anal sin limites

Capítulo 3 Multiorgasmo anal

Palabras:1626    |    Actualizado en: 02/09/2024

enir sobre mí, mi abertura anal fácilmente dejó entrar a este enorme «amigo», pero en mi interior, me p

or y a lo largo pasaba más adentro de mí, las sensaciones eran simplemente aéreas y placenteras, sentía

epierna, en mi clítoris, entre mis piernas también, agra

ano entre las piernas, sólo había sudor del lubricante que goteaba de mi entrepierna, debe estar calentándome, pen

corazón se aceleraba y empecé a gemir involuntariamente, como un gato antes de un orgasmo. Arqueé la espalda

hacía cada vez más grande y sentía cada vez más su placentero tacto y aquí,

Mis piernas empiezan a temblar, me estremecí un poco, mis ojos se a

pared del cubículo y empecé a sacudirme. El líquido empezó a salir de mi entrepierna,

el clítoris, sino por el coito anal. Pero no era un orgasmo como el de la masturba

polla del tío a un ritmo más lento, pero no paré y lo mejor fue que en cuanto se acabaron mis espasmos, hubo una segunda embestida y todo se r

horro de semen de la enorme polla empezaba a inundar mi interior, mojando mis paredes. Sigo emp

. Volví a apretar fuerte contra la pared con mis nalgas, el tío verti

a la pared unos segundos más. Me perturbó un cruj

es para ti». Tomé el papelito en mis manos, lo desdoblé y me quedé un poco perpleja, era un billete de cien dólares. Sonreí, se

o contra la pared, pero sin penetración anal en

abajo. Probablemente los efectos del multiorgasmo. Ni siquiera sabía qu

r. Miré hacia el retrete, abrí la tapa y me senté en él. Fue un alivio relajar las nalgas y los músculos del ano, el semen de mi novio empezó a salir de mí,

e les gustan a las chicas para poder lavarse después de sus intervencion

, sobresalía de mí, y supe por el hecho de que mi dedo había entrado fácilmente en

limpié con papel higiénico. Me vestí y, con las piernas un poco

lema. Me esperaba otra sorpresa, todas las sillas estab

de siempre me vio y con la mano me in

y buscar mi cartera con dinero, algo que olvidé donde lo puse, pero el camarero me detuvo y me

l respondió que realmente dis

esto, es la polla de su guardia, la guarda especialmente para tales placeres. No me molestó. Tampoco

simplemente quedarme dormida, una especie de fatiga irreal me derribó.

e pide que le llames mañana después del almuerzo", y me entregó otro

rlo. Si no quieres llamarlo, llámame y charlamos"

erme en cualquier momento. Diez minutos después ya estaba subiendo a un

ió y dijo que podía sentarme un poco recostada, así sería más cómodo para mí. Me di cuenta de que él conocía este lugar y lo

el umbral y fui al baño a lavarme. Cuando entré a la habitación, algo me dijo que necesitaba darme una ducha. Me

lemente no todo salió todavía. Pequeños chorros de agua tibia mojaron la parte de atrás de mi

ltas en mi cabeza. Rebobinando cada segundo que pasé en el club. No me arrepentí de lo que pasó esta noche; al contrario, me propuse de alguna man

ecesito comprarme un par de tangas, bueno, para esos v

ndo todavía acostada en la cama, marqué el número del barman que conocía, q

Obtenga su bonus en la App

Abrir
1 Capítulo 1 Un incidente en un baño público2 Capítulo 2 La polla de un extraño en un agujero3 Capítulo 3 Multiorgasmo anal4 Capítulo 4 Culo jodido5 Capítulo 5 El trabajo del agujero del inodoro6 Capítulo 6 Anal inusual con un extraño7 Capítulo 7 El pene entró en mí8 Capítulo 8 Cuatro clientes calientes9 Capítulo 9 Inserta tu dedo en mi10 Capítulo 10 ¿Qué tipo de chupona eres 11 Capítulo 11 Tres caucásicos sexys12 Capítulo 12 Vendida en subasta13 Capítulo 13 Amo con una gran polla14 Capítulo 14 Un orgasmo tan poderoso15 Capítulo 15 Un apareamiento obsceno en una celda16 Capítulo 16 Castigo por desobediencia17 Capítulo 17 Es un sitio infernal18 Capítulo 18 Una polla preciosa y sabrosa19 Capítulo 19 Dolor increíblemente dulce20 Capítulo 20 Me follan en el infierno21 Capítulo 21 Completos pervertidos22 Capítulo 22 Solo una salchicha enorme23 Capítulo 23 Simplemente no te mees24 Capítulo 24 Hambre de sexo25 Capítulo 25 Labios en el clítoris26 Capítulo 26 Qué fontanero más guay27 Capítulo 27 Prisión sexual en el sótano28 Capítulo 28 El culo más trabajador29 Capítulo 29 Tiene sus propias reglas30 Capítulo 30 Dos pollas en el ano31 Capítulo 31 Estoy en camino a un nuevo dueño32 Capítulo 32 Dulce penetración33 Capítulo 33 Que polla tan preciosa34 Capítulo 34 Club de esclavos sexuales35 Capítulo 35 Ninfómana inquieta36 Capítulo 36 Año jodido37 Capítulo 37 Esfínter frotado38 Capítulo 38 Culo para usar39 Capítulo 39 Doble penetracion40 Capítulo 40 Follando hasta la saciedad41 Capítulo 41 La lengua hace maravillas42 Capítulo 42 Es hora de un anal intenso43 Capítulo 43 Semen en las tripas