Destino de amor, bajó el velo del acuerdo

o 4- Ev

rad

abajar, ella juraría que se quedaría todo el día durmiendo; el golpe del día anterior, la dejó al

que tenía un enorme morado que cubría la mitad de su frente. Por suerte y con ayuda de maquillaje, logró medio

qué te

observó detenidamente, y negando al ver que

ado, nena, esta ciudad es de l

su frente mayugada, y sonriendo pensando q

y una niña, t

bolsa para empezar a trabajar, y negando al

es algo ingenua y distraída, y eso, mi niña

, moviéndose de aquí para allá, y escuchando cómo de pronto la campanilla de la puerta

do ay

paldas, y notando cuando este se giró que se trataba del mismo que casi la mata el día a

mí a nada más y nada menos que a la ci

onociéndola también, y deseando ahor

decir lo mismo del imb

cidencia, y deseando hacerla perder la paciencia como el día anterior,

se le lanzó a mi auto fuiste tú.

os lados, para ver si Rocío estaba cerca, y

El señor ciego no p

r, Rocío entró en la tienda, y dibujando los dos una

aballero. ¿En qué

galándole una mirada asesina, Sapphira no dejó de ve

reloj antiguo, ¿ser

ente lo podía ayudar, y asignándole la tare

uéstrale al joven los

e al niño rico que la siga, le mostró todos los ejemplares, a pesar de desear

so reloj de bolsillo, completamente de oro fabricado en 19

este. A él l

mirada del objeto, y guardando el resto, al ver

imbécil tie

argando su cuerpo sobre el pequeño mostrador, ta

, porque siendo yo otra persona, téngalo por seguro que no

biendo que él solo lo hacía para molestar, y planteándose f

necesitamos aquí, idiotas, hágame el

hombre había hecho su elección, y sonriendo, fingida

sera! Veamos si, al quejarme con

su mirada a él, y viendo que la tenía en su

lo que busca

rente a ambos, y dirigiendo su mirada

e lleva

o, quien era fanática a esas antigüedades, y asint

ha historia, un conocedor del tema

había enseñado sobre el tema, por lo que pensab

uelo, sé que l

dispuso a pagar por su compra, y acerc

señorita torpe,

s ojos al pensar que es el ser más arrogante s

ientos de Sapphira se desviaban para pensar en Evan, quien creía que era un hombre

ués, se dispuso a ver la televisión en donde un anuncio captó su atención enseguida. En este se veía la foto de Evan asistie

el soltero

rtamento, y centrando su mirada en el televisor

efe, Sapphi

do que todo esto no podía empeorar, ella solo se dejó caer e