El sexi doctor prohibido
mí. Pero a medio camino, al vislumbrar el montículo desnudo en el vértice de sus muslos,
n puñado de pelo con la mano. Saqué la lengua para probar un
separé sus rodillas. Mi lengua chocó con su clítoris y su espal
or favor
un ritmo con la lengua que la hizo jadear. Luego i
itó, meciéndose
nterrada en su ansioso coño. Pero es
dedo en su canal. Su calor me envo
espondió con un giro de caderas, cabalgando sobre mi dedo y mi cara
ron y se apretaron
ras se convirtieron en un gemid
do las sacudidas de su temblor. Sólo me
meció y se pasó la
reíble . Exha
on hasta mi polla y se volvieron pesados
Una maldición salió de mis labios. Ella lo acalló r
más fuerte, movi
ora. Me separé de nuest
su cuerpo, incapaz de apartar la vista de su coñ
polla pe
e sus labios y sus ojos se cerraron cuando entré en ella. Me balanceé hacia del
dole la cara, los labios entreabiertos por el
deras y me retiré lentamente, arrastrando la pol
mente se convirtió en gemido cuan
n, pero... . Me retiré y volví a met
adas a mi espalda, las uñas rastrillan
dilla y levanté su pierna mientras la penetraba. Una y otra vez. Ella
No pares. Di
te anudada. ¿Se estaba corriendo, a pesar
í. Un gruñido salió de mi garganta cuando conseguí dar
me recorría. La besé mientras n
pelo. Me inmovilizó hasta qu
olpeó con una sonr
estaba recuper
um,
. Por alguna razón, quería segui
noche. Más me valía
te llamas , murmuró, a
s y le acaricié el
durmiera
O
e de la casa d
̶ ¡Rose ! Papá salió dispar
el aire de los pulmones c
e me tiró de los labios. Su abrazo probablemente me partió la espa
se ? Me soltó y m
e y opté por las coletas. Los muchos abrazos y masajes de papá
a mano libre por el pelo. ̶ E
sonrientes, se arrugaron en
olsa de papel que había
vistazo. ̶ Pastel , exha
en la panadería de
lásico de R
i infancia. Todo era de tonos cálidos, crema y marrón, con algún toque ocasional de u
la casa? . Me encogí de ho
la puerta. ̶ A menos que cuentes es
e la chimenea, haciendo un ges
s fotos y los recuerdos hasta l
nía forma de abeja, pero con cabeza de mujer.
e quedó mirándola, con ojos
¿Cómo lo c
metido a Alex seis mese
entes. ̶ Siempre cambias
stibles de éxito y podía p
en blanco y apretó los labios. ̶ Bueno, tal
un sonriendo. ̶ Bie
nca me he sentido tan vivo. Estoy probando cos