La prometida del magnate

amantha Cedeño

ios de

manos latinos de varios países y pocas casas alrededor.

tró a la casa de mi amado a secuestrarme, no me dejó morir al volver en la noc

ión de mí al decir que nunca ha visto una mujer tan hermosa en su vida. Antes de irse me advirtió que una mu

n hijo, tiene que suceder esta tragedia. Estoy de dos meses de em

quel buen hombre, ya que si regreso aquella desconocida mujer

. ¿Cómo está? ¿Me extraña? ¿Está buscándome? Con toda seguridad está desesperado buscándome por t

a ciudad. Todas las mañanas al abrir el negocio entra un señor al parecer de 48 años de edad, es alto, buen mozo, lleva bigote y el cabello tien

da con una cálida s

ñorita muy

le puedo ayudar? —Le

argado y dos cucharas de azúcar m

se acerca mostrando un

pedirla, mi madre está muy mal de salud

mo puedo tener el suficiente dinero cuando nazca mi hi

ora en su último día de trabajo. Mañana cierro

i gran amor, salvarme de una muerte trágica, estar sola,

aradas sin el apoyo de nadie. Ni siquiera puedo regresar a Ecuador ya que mis padres y familia

a a la caja registradora dándome un poco de dinero extra a parte

cando trabajo desde hace varias semanas atrás, pero por mi

Manhattan porque hay gente malvada que quiere hacernos

tido que si no tengo para pagarle del mes no puedo entrar. Estoy con menos de 100 dólares en el bolsill

americana que están encantados con mi peculiar rostro. Parece que tengo un pequeño dolor en la barriga, estoy

? —Me pregunta una mu

stada por verme en una cama c

de urgencia a un hospital para ser atendida o perderá al

. —Le respondo sintiendo c

ante. Pensar que hace varios meses atrás todo era felicidad y una vida llena de promesas por cu

umillarme ante ellos para que me atiendan de urgencia. Al dirigirme al hospital más cer

voy a darme

ross H

nte se acerca para darme primeros auxilios. Ella me hace sentar y me da un cie

nto tiempo ha est

con voz apagada, débil y floj