En las intermitencias de la pasión

juni

o, Dav

cuando te extraño,

y es como si estuviéramos conversando; así, justo como esa tarde en l

u reacción con cada palabra y has

ervándome y te dieras cuenta de mis sentimientos repentinos despertados al acepta

on en años. Y las cartas se acumularon, hasta convertirse en todo un diario que mostraba mi vida.

nzada. Estaba tan emocionada por nuestro primer encuentro que creí que nunca más me iba a separar de ti, que por fin podría tener

spedida, se suponía que sería el comienzo de nuestro amor: un amor

eacciones, esas mejillas que se enrojecían, donde tus ojos verdes se separaban de aquel pape

gruesa voz al pronunciar mi nombre. Pero ahora todos estos recuerdos duelen, me lastiman, me llevan a esa tarde en me

i el clima estuviera a mi favor y lo expresa con las gotas de lluvia golpeando en mi paragu

a habilidad, cuando no tengo más ánimos de escribirlas si el destinatario se ha convertido en una imagen borrosa de la cual mi corazón llor

persona en el mundo que lo ama con sufrimiento? ¿Sabrá que h

oria, sí, justo en la mitad de la historia, comenzó una historia llena de amor apasionado y que ahor

me en tu pasado como el recuerdo de unas hermosas vacaciones. Yo también estoy dando un cambio en mi vida, y, aunque se me

verdadero adiós. Aquí, donde todo com

e esos planes y comienzo que decidist

vir una buena vida, ll

mor,

el bolso y, por último, al llegar a la casa, las refugió en la caja violeta junto con las otras, anhelando un día poder entregar dichos sent

s ganas de seguir amándolo, sin importar que él no sintiera lo mismo por ella. Pero ese día no llegab

estaba justamente sentado en el mueble de su sala,

lárgate ya —

esopló Harry con burla y se levant

un invitado

medio amoratada en el tabique, sin embargo, aquel rostro maltratad

ntimidaba mucho y a la vez

Sebastián. Lo tomó del brazo

omar mis cosas

u cartera, para después rec

le susurró a Loisa y desp

, viendo a Harry marcharse de la ca

ría a su tormenta de arena, justo en el núcleo, donde no tendría escapatoria. La haría olvidar viejos am