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El Despertar de los Caídos

Capítulo 4 Tres

Palabras:3683    |    Actualizado en: 02/04/2024

Desayuno con rapidez, tomo un baño y me visto con una camisa de tela blanca, unos pantalones holgados y unas botas de

a pleno sol. Meto en mi bolso de viaje también un abrigo fino que se me olvidó ayer, pues siempre puede haber imprevistos. En principio

arto. Tiene un semblante cansado y las ojeras denotan que apenas ha dormido est

fresco y no nos resultará tan p

e ayer. No pasará nada, pero no de

orar la sensación horrible que empieza a crecer en mi pecho que no augura nada bueno. Algo me dice que no la volveré a ver en

uerta de entrada. -Decidle que cuando vuelva la invitaré a

os a seguir ya está tomada, así que no le doy más vueltas. Cuando por fin llego a la vivien

onozco la voz de su madre

ue despiertas a todo el vecin

con derecho a darme órdenes!- Grita ella,

a pagamos entre los dos, Maria

familia, así que sí, tengo t

eciese- Tras esto se escucha un ruido sordo, pare

que me arrepiento de haber estado

rtar a la niña- La reprende él,

Escucho la voz cansada de Emma y es en

cuando abre. -Ya

ga se mantienen a una distancia prudente el uno del otro, pero es notable el desprecio con el que se miran. Me siento

s padres sin siquiera mirarlo

regunta su pa

ije ayer. Luego nos quedaremos unos días en

aber tenido es

bebiendo- Suelta con ira y veo q

enfrente de descono

ida, es mi mejor amiga- Repli

ertenezca a esta familia no se hab

nde en un

a su padre, y en verdad

ue entendí!-

ora puedes marcha

nos encaminamos hacia los establos de la ciudad, que es donde podremos alquilar una carreta y un par de caballos para que tiren de ella. Emma se mantiene en silencio la

s y colores, con precios que varían desde lo asequible hasta lo inasumible. Hacia el fondo se vislumbran los establos, que esta vez no cu

r alquilar esta carreta?- Pregunt

señorita. Más cien de f

a. -Yo alquilé una con mi familia e

precio- Replica con mo

es u

entras abro mi bolso y extraigo el dinero requerido. Se lo entrego m

rreta mediana es carísimo- Se

que pagarlo. No hay otro lugar donde se alquilen en esta ciud

a a la carreta que hemos escogido. Le doy las gracias y nos

a encontrar en el lugar al que nos dirigimos y desde luego que las de Emma son las más locas. Atravesamos varios pueblos y campo

nsar. Llegamos con la carreta hasta la puerta de una taberna con buen aspecto y la aparcamos enfrente de esta para poder verla a

alegre una camarera regordeta cu

enú del día?-

ejas y sopa de pollo. De segundo, un filete

pollo y lomo con patatas-

o. -Lentejas y me

rato les servirá

la cocina un chico de unos veinte años, alto y delgado. Tiene el cabello castaño oscuro y una barb

ai?- Pregun

marero aquí en

Emma- Nos presento. -Oye... por casualidad no sabrás

as cuatro horas

aba que nos queda

oras. El problema es que el camino tiene muchas

ro si se tarda tanto... No creo que nos dé tiempo a estar

Yo quiero llegar al desfile sí o sí. Y si lleg

camino que discurre por el valle, pero es peligroso. Está lleno de

a a reír a carcajadas. No puede parar y casi se atraganta con la sopa

camino está tan plagado de malas gentes.

ma. He vivido mucho tiempo en

te creo- Lo obse

as a las siete de la mañana- Pide.

ortés. -Y no te preocupes, e

abremos hecho bien en aceptar su ayuda, pero no me ha parecido mala persona.

pronto entonces- Comento. -

, yo me qu

y buscando. Al parecer el pueblo solo cuenta con una posada y esta se encuentra en el punto más alto. Me dicen en confianza qu

areja de ancianos no exageraba. El edificio parece pertenecer a otra época y resulta incluso lúgubre. Nos adentramos y pedimos una sola h

imonio en el centro cuyas sábanas tienen unas manchas que quizás sea mejor no preguntarse de qué son. La madera cruje en demasía bajo nuestros pasos y las paredes

Emma, no sé si para ani

e siempre les he tenido pánico y hoy voy a tener que dormir en una habitación que es

stas también duermen en sitios tan hor

ra merezca la pena, Haley. Esto

do se me suba una araña en

údame a quitar las sábanas, no

ue al menos parece estar limpio. Me quedo en silencio durante un rato obse

ta Emma bostezando. -Me refiero, cuando acabe el

guntar cuál es

s buena ide

Quizás Kai

n chico de pueblo. Pero no

mientos. En mi caso, pienso en lo que estarán haciendo ahora mismo mis pad

s ellos físicamente. Cuando los capturaron a Matt le quedaban dos meses para cumplir los quince y Ry tenía tr

y soy despertada bruscament

te!- Me apremia. -¡Que

os más- Gruñ

llegamos. Ar

mientras me incorporo

en el espejo y la verdad es que no me espanto como pensaba. De hecho, estoy bastante bien. El vestido es algo ajustado, remarcando mi cintura, es de color az

s en un pueblo, porque en un par de minutos hem

Pregunta cu

algún soldado guapo? Por supu

esfile a ligar

Responde

y tiempo que pe

anejar él los caballos y, para nuestra sorpresa, lo hace muy b

?- Pregunta ella de r

la vista fija en el camin

a vez. -Pero cumplimos veinte este

la univ

ónoma de Jadi

está nada mal, p

e camarero?- Pregunta m

camarero en la taberna Clown es el mejor emp

o te aburre vivir en

sta la tranquilidad y la fa

un sitio así la horrorizaría. Le encanta vivir en una ciudad, tene

a Emma le pasa lo mismo. Él es de esas personas cuya personalidad es fresca y sencilla, te sientes cómoda en su

es?-Grito con

rmura mientras se agacha al pi

l q

qué y se aproxima hacia nosotras con u

ntras nos muestr

cogido setas?-

jo que crecían muchas en esta parte del

nosas- Comento c

ó nada. Pero dijo que te hacían sentir co

go rápidamente y

encoge de hombros, mientras part

nada. Estás chiflado, Kai- Me rí

, sí, s

as que ha cogido. Sinceramente me preocupa pero decido no volver a mencionarlo. E

ueja poniendo la mano

ra!- Grita un hombre que aparece

-Estamos a punto de llegar

os todo lo que lleváis en esos bol

rotundidad. -

n a carcajadas y e

mo, niñata. Porque créeme que podría ser mucho peor.

, golpearle, o cualquier otra cosa, pero Ka

o un trato

s- Responde o

una vez de las setas mág

qué h

lsa de tela que contiene las setas que le queda

la curaron y estaba casi enterrada. Mi jefe de la taberna me contó que su mujer estuvo a punto de perder a su bebé, pero grac

, y no me extraña que se dediquen a

lo que dices?- Pregunta con s

uro. -Pero si no lo hacéis, serán otros los que

da con las setas que le quedaban a Kai . Si él no se hubiese comido más de la mitad

omamos nuestro camino en silencio

no, Kai - Comenta E

ontos, lo cual es

zón, sí que podías

an aceptado el trato, pero

plan B?- Pregu

puñal- Dic

mamos las dos a l

illo. Ya os dije que he vivid

sorprendido, Kai. Y eso

uelve la vista al horizonte. -Bueno, señori

e personas, debido seguramente al desfile. Va a resultar que Emma tenía razón y yo era la rara por no querer ir. Nos acercamos hasta el lugar en el que debemos dejar nuestra

ssania, Haley-

por detrás. -¿Queréis que o

entusiasmada. -Digo, ya qu

a estupidez- La interrumpo. -Cuanto ant

e regaña. -Imagina que aquí

s dioses, no!-

oldado se fija en

Kalaryan? No, la verdad, no l

estate abierta a

entido porque es imposible. Yo jamás me enamorarí

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1 Capítulo 1 Prólogo 2 Capítulo 2 Uno3 Capítulo 3 Dos4 Capítulo 4 Tres5 Capítulo 5 Cuatro6 Capítulo 6 Cinco7 Capítulo 7 Seis8 Capítulo 8 Siete9 Capítulo 9 Ocho 10 Capítulo 10 Nueve11 Capítulo 11 Diez12 Capítulo 12 Once13 Capítulo 13 Doce14 Capítulo 14 Trece 15 Capítulo 15 Catorce16 Capítulo 16 Quince17 Capítulo 17 Dieciséis18 Capítulo 18 Diecisiete19 Capítulo 19 Dieciocho20 Capítulo 20 Diecinueve21 Capítulo 21 Veinte22 Capítulo 22 Veintiuno23 Capítulo 23 Veintidós24 Capítulo 24 Veintitrés25 Capítulo 25 Veinticuatro26 Capítulo 26 Veinticinco27 Capítulo 27 Veintiséis28 Capítulo 28 Veintisiete29 Capítulo 29 Veintiocho30 Capítulo 30 Veintinueve31 Capítulo 31 Treinta32 Capítulo 32 Treinta y uno33 Capítulo 33 Treinta y dos 34 Capítulo 34 Treinta y tres 35 Capítulo 35 Treinta y cuatro 36 Capítulo 36 Treinta y cinco 37 Capítulo 37 Treinta y seis 38 Capítulo 38 Treinta y siete 39 Capítulo 39 Treinta y ocho40 Capítulo 40 Treinta y nueve41 Capítulo 41 Cuarenta42 Capítulo 42 Cuarenta y uno43 Capítulo 43 Cuarenta y dos44 Capítulo 44 Cuarenta y tres45 Capítulo 45 Cuarenta y cuatro46 Capítulo 46 Cuarenta y cinco47 Capítulo 47 Cuarenta y seis48 Capítulo 48 Cuarenta y siete49 Capítulo 49 Cuarenta y ocho50 Capítulo 50 Cuarenta y nueve51 Capítulo 51 Cincuenta52 Capítulo 52 Cincuenta y uno53 Capítulo 53 Cincuenta y dos54 Capítulo 54 Cincuenta y tres55 Capítulo 55 Cincuenta y cuatro56 Capítulo 56 Cincuenta y cinco57 Capítulo 57 Cincuenta y seis58 Capítulo 58 Cincuenta y siete59 Capítulo 59 Cincuenta y ocho