La amante del lobo

a Co

ra un americano. Daba por sentado que mi pequeña gastritis era de procedencia fr

bargo, no fue suficiente una descripción del fornido hombre para encontrarlo, ya que

dea de quién era el condenado dios del sexo con el que pase mi primera noche. No me quedo de otra que alegar borrachera,

grave de tener un bebé de un hombre que ni siquiera conocía. La mujer fue tan malvada que quería que abortara, n

cto. No fui irresponsable por salir embarazada, ya que si me tome mi método anticonceptivo, pero he aquí la falla de los humanos.

lteras, y mucho menos poseen la estabilidad emocional para traer al mundo un nuevo

con un brillo de absoluta felicidad en sus ojos grises. Puedo notar que detrás d

pesa bastan

sangre llama

o un

oco incómodo con esa palabra, sin embarg

te ves muy joven —dice—¿Qu

, si estuvimos juntos cuando apenas tení

nta y

señor —

, ni siquiera sé cómo procesar tanto en

ra salir con él, no es necesario que tengamos alguna relación, me importa más que mi hijo sea feliz y c

a para tu edad

presente en la vida de Kalen, ya luego veremos cómo contarle a mis p

y se va a su trabajo, me voy con Kalen a comprar algunas cosas para el

…

embargo, abro encontrando a Darek con algunas bolsas de tienda de

tienda y traje algunas

algunos coches en la alfombra y se detiene al ver a su padre. Le e

—besa su mejil

ena ¿te quedas a cenar?

la

ver a Darek hoy, sin embargo, me siento bien con su compañía y ver qu

sin embargo, el destino siempre trabaja de manera distinta y amo a mi pequeño K

tó con Kalen en sus brazos, le extendí el biberón para

lleva una camisa blanca ajustada a su fornido cuerpo. El pequeño libera un gas, sin embargo,

preocup

deshace de la camisa. No puedo evitar hacerle un recorrido con la mirada, Darek tiene un cuerpo ba

ueño, le limpio la comisuras y luego se lo entrego a su padre mientras acepto la camisa. Me retiro de la mesa al lavado, con un

seca —asiente y en si

…

uién no querría quedarse dormido en ese pecho? Sin duda envidio

ormir con sus labios separados—, sígueme —me po

o deposita con cuidado en la cuna, lo mira por v

or dejarme ser parte de la vid

s, ninguno fuimos responsable ese día

hoyuelos «Si, es jodi

sa —me r

camisa de este, se la entrego y observo como la pasa por sus f

a puerta porque Kalen libera un g

caricio su mejilla por donde ruedan

aferra a la camisa de su padre—, todo está bien —lo escucho susurrarl

go, él sonríe mientra

un poco más de ti

año, no creo que Kalen lo deje ir por varias horas, ya hizo esa