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Prisionera del CEO vengativo

Capítulo 4 4

Palabras:1638    |    Actualizado en: 12/09/2023

ayl

mientras que sostengo con amargura una vieja foto arrugada y maltratada

ord, esta imagen simbolizó en el pasado el amor de mi juventud donde viví los mejores momentos de mi vida

legre y novelesca, pero ti

ré con profundidad la escena, puedo rememorar el momento exacto donde fue tomada, puedo sentir su mano sujeta

ubieran pasado ni dos años. Aún puedo escuchar su risa plasmada en mis oídos como una melodía angelical, observe, un p

a, ella todavía

a en mí viejas heridas. ¿Por qué?, ¿Por qué tuviste que

ba como a u

or q

arrugada nuevamente al cajón de donde la saque, volviendo a la oscur

dres se ahogaron tanto en deudas que uno, incurrió al suicidio, y otro sufrió un ataque al corazón

no a mis padres por dos años trabajando para sustentarlos, mi intensión era sacarlos de la bancarrota, lo poco que ganaba como interno en una pequeña compañía de moda, fue suficiente, pero para mis padres la decadencia por caer del peldaño más alto era peor que una sentencia de muerte, mi madr

quien salvar, solo me quedaba una motivación, vengar su memoria. Prometí ante sus tumbas poner a los Echeverría en el mismo lugar que nos

vadió desde el fondo de mi corazón, una oscuridad que

creé nuevas bombas en oriente, y gane la demanda que tomo dos años en apelarse contra los Ec

n mi oficina, note, que era hora de re

muñeca, y a esta hora la cena debe estar lista, son las 8 y 30, pero no me iré h

o por la

usto, Tayler regresaba a su mansión, en un Lamborghini Si

después de haber descubierto q

ue vigilaban el frente de la c

tardes

no de

á?, ¿Ya se acostum

, aunque esta tarde int

l ceño con burl

s dio mucho

osa, lo denigro de muchas formas, señor, dijo que su mansión como s

umillado por ese comentario,

ompensar algo en

s de acomodarse el saco en

lo recibieron, tomando su s

ena está recalentada com

ero Tayler solo tenía l

tá en el

esperándolo des

que esté con

la servidumbre, logrando qu

azos cruzados, hace dos horas la obligaron a sentarse a esperar... Los sirvientes se apresuraron a servirle a su esposa un plato de comida

mar los cubiertos, asumiendo que no había visto el armario personal que puso en su habitación para ella, llena de vestidos y zapatos al lado del suyo, pero no le remarcaría ese error, disf

cena

pequeño trozo de file

o hambre,

u estómago gruñó tan fuerte que la ave

ago no dic

ne, quien no sab

No te es suficiente con arrebatarme

mientras tomaba otro pedaz

monio sigue siendo tuyo, seguirás manejan

y dio ot

a broma

ocado en su boca

aces, no deberías desapr

a a sus sirvientes para qué se llevarán su pla

noche, tengo que terminar de leer los informes de avance. Así qué puedes que

que se llevaran el plato que estaba c

r, yéndose de

tre manejar mi empresa o quedar en bancarrota?", se preguntó, era imposible que el fuera amable y la haya dejad

erto que trabajaría toda la noche, ya que no subía las es

que la acompañaba la obligó a entrar en la habitación. Y una vez que se

nos minutos, no pi

l sueño, pudo más, y la d

te dormida en su cama. Sus piernas se mezclaban con sus sábanas, sus cabellos castaños cubrían las al

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