Entre el perdón y la venganza.
e desconocido, sentía que la sangre le hervía de rabia, ¿cómo es que Mónic había aceptado bailar con ese h
naba de él, podía notarlo por como las personas preferían mantenerse alejadas de él. Luis
a mirarlo de mala manera, Luis Alberto alzó las manos indicandole a su
lo obvio, Dominick gruño por lo b
tan feliz entre los brazos de ese desconocido y eso lo hacía rabiar, sentir inseguro y molesto, no tenía las palabras exactas para describir todo lo qu
Alberto, no se había acercado con la intención de molestar pero no
ho y su mirada penetrante sobre su chica y aquel desconocido- quiero qu
bastantes difíciles de cumplir y lo peor de todo era que cuando a Dominick se
pareciera estúpida, necesitaba saber quién era ese hombre, lo
isfrutar de la velada para luego ir a casa a descansar, quizás charlar un rato con
, un violador...- Dominick comenzó a enumerar todas las posibles co
para siempre- esas palabras fueron directas al corazón de Dominick, resultaron realmente hirientes y lo peor de todo era que sabía que
ta, pero no era capaz de renunciar a Mónic, él estaba dispuesto a luchar por ella, a
herido a su amigo y ahora comenzaba a sentirse culpable al ver la
la música terminaba y el hombre enmascarado se despedía razón de Mónic con un suave beso en la mejilla, tenía que aprender a
y Luis Alberto, le correspondía estar ahí aunque no quisiera; se ace
cerca sentía que su mundo cobraba un nuevo sentido, como si estuviera dónde realmente debería estar, hasta ahora comprendía que su lugar siempre estaría junto a Mónic, él estaría a su lad
la miro fijamente, detallando sus finas faccion
le como toda la rabia y todas esas emociones negativas desaparecían con solo observar su rostro angelical, al ver la sutil
o e intenso que se tenían, podía ver que él no era el único que la había extrañado, ella también lo había extrañado a él ; de
lo importaba disfrutar su compañía, aunque fuera una ilusión momentánea que tarde o