• AMOR Y VENGANZA •
-se dijo a sí misma comenz
u esposo incluso le había ocul
a estaba segura que él lo había hecho para «proteger su patrimonio», ahora no le sonaba
antar un hogar, habían sido arrojados a la basura,
gó Axel esperando a que la mujer
trabaje en un lugar como esos? -contestó Sheila comenzando a
error, que su amado esposo solo estaba pasando por un mal momento y po
aquella que ingenuamente creía en
ce un año
lidad le dio duro en el instante en que vio la fotografía de su esposo en el dispositi
o sus manos a la cabeza
a, se sentía como una completa estúpida, su esposo le había ofr
Oliver y el señor Morgan, su padre; tampoco le había mencionado que él había presentado como su e
n lo que pasó hoy, ¿Qué no hará cuando se enter
r un poco para contarle acerca de las re
se hombre no tenía las capacidades para encabezar la nueva
surró la mujer dirigiendo su
color zafiro de Sheila, se limitó a as
do? -cuestionó sintiendo miedo
encontraba en el mejor de sus momentos, su fuerza la había abandonado c
la manera más vil que jamás se imaginaría. Es má
a la insistencia de la mujer, terminó descubriendo cada una de las cosas que s
esivo y no decía nada. Sus manos inconscientemente acariciaban
-afirmó Axel con una radiante sonrisa, sus ojos se habían achicado un poco. -Estoy a
as que hizo -sentenció Sheila en un tono muy bajo d
cucharla co
abitación, para qu
su mente comenzó a trabajar en un plan para hacer cómo ella quería.
azar uno de los más grandes planes que
comple
a Sheila de casarse de manera ficticia, de manera que, él obtuviera la
entera hasta que de sus ojos no brotaba ni una sola lágrima más, ella
sino por todo el tiempo que había desperdiciado en esa relación, los años que
el que una nue
nclusión al notar que no importa
había escondido todos los objetos con los que ella podría intentar algo en
minar los rastros de «la Sheila
agradecerle por la ayuda que recibió la noche an
les que le permitieran volver a su lado, hast
n -saludó la pelirroja co
eñor Morgan», el cual se encontraba cocinando
cos dijeron que Sheila
rió ocultando su semblante de preo
, de manera que, cuando estaban sentados a la mes
, Sheila, no solo seré tu es