La preferida del Millonario (bajo tus garras)
n sofá, aunque es pequeña huele muy
ntencia, tengo miedo de lo que me pueda pasar, y se que Yus
, no quiero ver a Yusuf de nuevo, de ma
ue cueste, prefiero morir int
de mujer, mi corazón estaba a mil, pero al percatarme d
¿Cómo que señora lember? Si aún
jar escapar ni un ruido, estoy asom
está molesta, luego saca s
dite y usted sabe que yo no tengo edad para eso–e
charlando con Yusuf. me arrastro con cuidado y salgo de la c
hé que la mujer g
por ningún lado, al subir a la planta superior abrí una puerta que conducía a la sala de estar, mire a mi alrededor y no había nadie, abrí los ojos como plato luego de ver la puerta que me indicaría la salida, en este cas
, está muy dura, pero tengo fe que la romperé, el jarrón era de u
el vidrio, solo un poco más, un poco má
r unas manos encima de m
al escondite–me empuja hacia la pared, de inmediato solté el jarrón,
ro–él se recuesta en mi espalda y puedo
en mi cuello, su beso es tierno, pero con solo
digo, y él hace lo contrario, me da un
con voz juguetona, no quiero besarle, en re
icante, poco hombre—le gritaba muchas palabr
ro rápido, me encuentro con sus oj
sita burlona, pero para mi sorpresa m
que mi mujer
ambre–apart
sta el momento no cruzó palabras, ya los pocos
e tez mestiza y su cabello es
–ella asiente y da med
i brazo– vas a ver como te engordaras con
ngo hambre!–le grit
ntes la voz–me jala el brazo y yo doy un leve
orta más tard
ñora Sara, informa de que
hay una gran variedad de platos, luego m
sién
erca a mi, me agarra de la mano y la
difíciles, ¿Si?, en reali
piezan a salir por sí solas, él me mi
dejarte ir
uya. estas ma
tengo no voy a dejarte ir- de repente su rostro cambió, sus cejas
jalón, después camina hasta e
mi cerdita–se c
repito está loco. además no me atrevo a comer nada, aunque to
r y lleva a su boca
ón?—tras mi pregunta vi como se le abr
—mastica su comida
de convencerlo para que me libere, nunca pensé que
dirige hacia mí, cerré mis ojos, es
o a poco y lo veo
o me ten
o, pero si no puedes co
ndré miedo–le sonrió
es–af
r al baño?–él hace un
caso–Ya quisieras maldito. Pero si tengo que actuar como buena esposa para salir de aq
mientras me traía al ba
ha?—pregunta a tr
dí con la voz entrecortada. e
Por cierto más tarde t