La despertaron los truenos y relámpagos, se quedó pérdida en sus pensamientos viendo golpear las gotas de agua su ventana pero el estruendoso ruido de un Ferrari la hicieron volver a la realidad, se puso una larga bata blanca de seda y corrió a la entrada principal a esperar a su esposo, el entro caminando lentamente la vio fríamente de pies a cabeza y se sentó en el sofá, quieres un café pregunto ella? Ujumm si respondió el,- ella se apresuró y fue a la cocina de repente unas frías manos en su cintura la hicieron brincar del susto rápidamente sintió el olor a alcohol lo cual le provocó náusea