Login to ManoBook
icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon
De matrimonio a Venganza

De matrimonio a Venganza

Gavin

5.0
calificaciones
24
Vistas
11
Capítulo

El día de mi boda, en la imponente nave de la hacienda familiar, mientras el sacerdote hablaba del amor eterno, sentí que, de algún modo mágico, había renacido. Mi mirada se posó en Javier Mendoza, mi futuro esposo, y el mundo se desdibujó para mostrarme con una claridad aterradora la imagen del cuchillo helado hundiéndose en mi espalda. En mi vida anterior, este mismo hombre, junto a Sofía, su amante, me despojó de todo: mi vasta herencia, el imperio de aguacates de mi familia y, finalmente, mi existencia. Morí sola, traicionada, mientras su ambición brillaba inquebrantable. Ahora, llevaba el mismo vestido blanco, en la misma iglesia, a punto de repetir la farsa. La sonrisa de Javier, antes cegadoramente encantadora, solo despertaba náuseas y un doloroso amargo recuerdo. ¿Cómo podía un alma regresar de tal deshonra? ¿Por qué la vida me ofrecía una segunda oportunidad para este mismo calvario? Pero en lugar de la desesperación que me consumió antes, una fría y calculada determinación invadió cada fibra de mi ser. Ya no había lugar para lágrimas ni súplicas. Mi "Acepto" rompió el silencio nupcial con una firmeza que sorprendió hasta al propio Javier. No era el inicio de un matrimonio, sino el comienzo de una venganza que duraría dieciocho años. Cada paso suyo, cada aliento de alegría robada, se convertiría en una pincelada de su propia y lenta destrucción. Esta vez, ellos mismos forjarían las cadenas de su perdición, mientras yo los observaba desde la sombra.

Introducción

El día de mi boda, en la imponente nave de la hacienda familiar, mientras el sacerdote hablaba del amor eterno, sentí que, de algún modo mágico, había renacido.

Mi mirada se posó en Javier Mendoza, mi futuro esposo, y el mundo se desdibujó para mostrarme con una claridad aterradora la imagen del cuchillo helado hundiéndose en mi espalda.

En mi vida anterior, este mismo hombre, junto a Sofía, su amante, me despojó de todo: mi vasta herencia, el imperio de aguacates de mi familia y, finalmente, mi existencia.

Morí sola, traicionada, mientras su ambición brillaba inquebrantable.

Ahora, llevaba el mismo vestido blanco, en la misma iglesia, a punto de repetir la farsa.

La sonrisa de Javier, antes cegadoramente encantadora, solo despertaba náuseas y un doloroso amargo recuerdo.

¿Cómo podía un alma regresar de tal deshonra? ¿Por qué la vida me ofrecía una segunda oportunidad para este mismo calvario?

Pero en lugar de la desesperación que me consumió antes, una fría y calculada determinación invadió cada fibra de mi ser.

Ya no había lugar para lágrimas ni súplicas.

Mi "Acepto" rompió el silencio nupcial con una firmeza que sorprendió hasta al propio Javier.

No era el inicio de un matrimonio, sino el comienzo de una venganza que duraría dieciocho años.

Cada paso suyo, cada aliento de alegría robada, se convertiría en una pincelada de su propia y lenta destrucción.

Esta vez, ellos mismos forjarían las cadenas de su perdición, mientras yo los observaba desde la sombra.

Seguir leyendo

Otros libros de Gavin

Ver más
Mi familia Bestia

Mi familia Bestia

Moderno

5.0

El rugido del oso pardo volvió a aterrorizar las montañas de Asturias, marcando el día de mi renacimiento. En mi vida anterior, ese sonido me llevó a una falsa esperanza y a la traición de quienes decían protegerme. Esta vez, con la memoria intacta, me negué a repetir los errores. Mi abuelo estaba en peligro, y solo yo podía salvarlo de la fiera que asediaba su casa. Diseñé un plan audaz y, a solas, me enfrenté al animal, que en realidad escondía un secreto atroz de mi hermanastra, Lucía. Logré rescatar a mi abuelo, pero la gratitud familiar fue reemplazada por una rabia incomprensible. Mi padre, Javier, apareció no para felicitarme, sino para condenarme. Ante los ojos atónitos de todo el pueblo, me abofeteó, me arrastró por el suelo y me desheredó públicamente, acusándome de causar todo el caos. Su madrastra, Isabel, y mi hermanastra, la verdadera culpable, Lucía, festejaban mi humillación con sonrisas ladeadas. ¿Cómo podía un padre, cegado por la devoción a su hijastra, rechazar a su propia sangre después de tanta valentía? La sensación de injusticia me perforaba el alma, dejándome sola y rota frente a la indiferencia de mi "familia". El silencio del pueblo era un eco de mi desesperación. Pero justo cuando la desesperación me paralizaba, las luces azules y rojas de la SEPRONA irrumpieron en la plaza. Lo que siguió no solo desenmascaró el robo del osezno por parte de Lucía, sino también la impactante verdad sobre una beca universitaria completa, mi billete a la libertad, que habían escondido. Con mis opresores bajo custodia y la verdad al descubierto, Sofía se enfrenta a un nuevo comienzo. ¿Podrá una joven renacida sanar sus heridas y construir un futuro lejos de las sombras de su pasado familiar?

Venganza DE Una Abuela

Venganza DE Una Abuela

Moderno

5.0

Mi nieto Mateo era la luz de mi vida, un chico de diez que soñaba con ser ingeniero. Vendía tamales conmigo, sin quejarse. Pero un día, todo se vino abajo. Lo asesinaron por intentar grabar al hijo del alcalde, un matón. ¿La policía? Declaró que fue una riña de pandillas, limpió las manos del asesino y culpó a mi Mateo. ¡Caso cerrado! Me convertí en una paria. El pueblo me evitaba, los medios, controlados por el alcalde Morales, me difamaron como una loca extorsionadora. La esposa del alcalde me ofreció dinero sucio para callarme, pero al rechazarlo, las amenazas se hicieron reales. Mi casa amaneció pintada con insultos: «MATEO RATA». La policía, cómplice del poder, me agredió y pisoteó la única foto de mi Mateo. Estaba sola, sin voz, sin dinero. ¿Cómo iba a pelear contra un sistema tan corrupto? ¿Cómo obtener justicia cuando todos los hilos se movían en su contra? La rabia y la desesperación me consumían. Pero entonces, vi la Medalla al Valor Heroico de mi hijo, un infante de marina muerto en servicio. Recordé las palabras del Almirante en el funeral: «Su familia es nuestra familia. Nunca estarán solos». Con esa medalla como mi única esperanza, sin nada que perder, vendí mis pocos ahorros y viajé doce horas hasta la base naval. Allí, bajo el sol poniente, con la medalla en la palma, me arrodillé frente a la reja, esperando. ¿Respondería el Almirante a la promesa hecha a un héroe? Mi lucha por la justicia apenas comenzaba.

Quizás también le guste

Capítulo
Leer ahora
Descargar libro