Redes de olvido

nal acudió a uno de sus desfiles e intentó conseguir un autógrafo y después le pidió que se pasara por el ala de oncología de su hospital. Ella le dio la esp

atrimonio era lo último que se le pasaba por la cabeza. No tenía forma de controlar lo que ella

enfoque el asunto?

nada. Pasa

e una mala opinión pública con todo lo que está pasando c

prensa podía publicar todo lo

. Y me importa una mierda l

Mi trabajo consiste en que me im

ineral porque

ento aho

erado de tu opi

dé la gana. Y eso quiere d

levantó d

es bebe

unció e

, gra

có dos botellas del frigorí

ué

ella al tiempo que cerraba la

a bien tratar con la prensa, pero a él no podía ocul

poyó en el respaldo de la silla mientras g

ha despertado

é te r

enarcaba una ceja, añadió—: A tus obje

e per

co, algo que ya has logrado, y de querer ampliar tu red de empresas, cosa que estás con

el rumbo de esa conversación. Regresó al escritorio,

a bonita, pero podrías permitirte algo mucho más grande y muchísimo más llamativo. Conduces el mismo coche de hace cinco años, no se te va la mano con los gastos, no tienes un yate o un deportivo, y ni siquiera te vas de vacaciones a todo tren. Salvo por la semana en la que d

o. Estaba anocheciendo y las luces de la ciudad se reflejaban en el agua. Y la crecie

ninguno de los beneficios que obtienes de tu trabajo, así que siento

muerto que contárselos a el

ene si no se refleja

esó con

r. Tú estás tan entrega

bién tengo una vida más

intió al comenzar esa reunión había desaparecido. No necesi

ivada no es

también amistosa, y compartían no solo el amor por esa empresa, sino también una mutua admir

n silencio. Al final, ella dejó el botellín en la

Margarita el lunes por la mañana, así que estar

un patán. Pero, joder, su vida pers

se volvieron para encontrarse con la

a dormir aquí o a

onrisa alicaída mientras ter

ya eran más de las siete. Dejó las gafas encima de los papel

n tarde. Solo estábamos atando unos ca