EL CLUB DEL DESEO

n alegres hablando, muchos lo saludaban y él como

bía una hermosa pelirroja bailando muy sexy en un tubo, y en la tarima de

detrás de la barra, quien ya sabía que debía prepara

ida en especial al

ento — dijo feliz que to

dió quedarme un rato después de mi turno

aventura de una noche y tenía 3 adicionales para sus empleados que no bailaban y no ganaban un extra. Claro que no todos tenían ese privilegio, sólo los más leales, y los que lleva

upuest

Gael agarró su bebida para ini

levantó su copa para bri

puesto, está increíble para una noche de buen sexo, llamó a un camarero y le dijo que llevara unas bebidas y bocadillos y dijera que iban de parte de él. El hombre obedeció de inmediato a su jefe, las mujeres miraron a quién enviaba los tragos y al ve

merinos de hombres encontró a Ma

tal va

que hoy ya no caben más clientes, p

el lugar más grande — Mas

el periódico, esperemos que a partir de mañana vengan nuevas can

Indiana no escogerían a ninguna, las echarían con tal de

ez Gael, deberías de

s cuento contigo para e

el le sonrió a su amigo — por cierto Jenny cumple 27 años la pr

salón que esté disponible y no lo h

aci

i guardaespaldas, eres mi amigo, una de las pocas personas que creyó en m

osa rubia subía. — Voy a ver a mi esposa. — Gael miró hacia

te que hay que estar pendiente y

será

de los casinos, una parte muy hermosa también de

—preguntó con s

cho, ladrón, jugó y apostó ahora no q

mas?— pregunt

puedo darles a mi hija, creo que la muy inútil aún es virgen — dij

, mucho menos lo obligamos a estar aquí. Debería darte vergüen

o se quedó pensando algo que nunca había hecho y su mirada se oscureció al pensar en el cuerpo de su hija, Gael su

este parásito abajo y no lo dejen salir hasta el lunes. — Gael vio cómo el hombre maldecía mientras lo llevaban a rastras, al menos h

una hora para que el club cerrara, la misma mujer que había aparecido iniciando la noche se detuvo del

ue envió a nuestra mesa. — Gael como todo un don Juan sonrió, como solo

er algo por mujeres hermosas. — su voz er

y Gael sonrió, conocía el juego de las muj

apenas empieza — Gael se acercó hasta que

ida, es mi despe

rtancia a que fuera a casarse. Cuando la dichosa mujer pensaba hablar Gael la interrumpió con un beso, no estaba dispuesto a per

mujer no perdió el tiempo ta

la a su habitación exclusiva ahí mismo, en varias de estas ya se ve

dos, pero a él le daba igual, pronto el vestido estuvo en el piso, al igual que l

mbos al éxtasis, una vez Gael se desahogó, salió de ella, se quitó el

er desesperada por volv

único que quiero es irme a mi casa y dormir. Y tú tienes que irte a preparar para una boda — una vez listo s