Un Amor Tan Intenso

re y hermano de Amelia, que ya lo estaban esperando

trigo a las gallinas. Miraba como cultivan la tierra, y a él el dieron un saco que llevaba colgando al cuello con semillas, para que las dep

que se rompa el tronco — reía Teodoro, el ver el

usted? — pregunta Víctor al pasar su mano por la frente,

que sí,

la ropa del niño, para

como cortar los maderos y en qué punto d

boles no se usa carbón? — pregunta Amelia

máquinas de vapo

s que la madera — explicaba Teodoro a su hija

emaría la casa

fuego es fuego y es caliente igual —

tan fuerte, que por eso lo ocupan

colocar un carbón en la est

hagas, le quemaría el esto

para saludarlo. Un niño de la edad de los muchachos, baja d

uda el niño de piel m

ola — le salud

pregunta Víct

señor de los esta

o dice a Víctor y le da

, soy

el patrón — le co

ir a jugar conmigo también en vez de estar en esa

ce que no hay problemas para que salg

sé — dud

a cazar ranas

ranas? — Víctor sonreía muy

l estanque a jugar

quiero ir —

s dan asco esas cosas... esto es s

me da asco — se

lla me dejará salir — dice Víctor alegre

dre, cuando quiera vamos — le invitaba Juan y se marcha cor

a al caballo. Fue muy agradable ese día en el campo y

el muchacho, es que llegaba siempre sucio y con barro en la ropa, así que se debía bañar todas las tardes. Por su parte, a Amelia ya no le gustaba que se juntara con Juan, sentía que él le estaba

— reclama Amelia s

gane te tiene que ir a rescatar — dice Jua

r, yo también quiero pelear

ncesas y tienes que esperar a

que estás durmiendo hasta que llegue

y otro para la mamá de Víctor, ya que, si tenía suerte, la señora Fortunato estaría comiendo algún postr

rescatarme? — pre

jugar a eso — contes

deberá seguir du

s, trae los frascos para c

trega el ramo de flores a su madre y luego busca a la madre de Víctor

ctor? — pregunta Mercedes

los establos, ya no quiere jugar

e, le ofrece un alfajor de la cesta y

le gusta jugar con otros niños, pero e

o estar a

de compañía ¿Te gustaría leerm

uentos a la biblioteca. Pasaron así un rato hasta q

s nuevamente, mira cómo has llegado — le regaña s

te traje un regalo — Víctor estaba orgu

una expresión de asombro y asco, al ver dentro

imales no le gusta estar adentro de fr

o? — pregunta

que lo liberes. Puedes traerme de regalos fl

n conseguir su regalo, yo s

e tú ahora, eso fue por meterte en el barro — cont

y empuja a Amelia con tal fuerza,

, discúlpate con Ameli

res más a ella que a mi —

me han dado ambos, pero que seas mi hijo,

rabajo atrapar la rana — Víctor realiza

á en el estanque de donde la sacaste, y

por empujarte — di

no me dolió