Dos Extraños
AS
iciembr
nica, Ca
laman todos mientras que mi madre camina hacia la mesa con mi pastel de chocolate favorito y empiezan a cantarme "feliz cumpleaños." Como siempr
pienso por de
madre cuando todos me miran expectantes a q
os del colegio, miro a mi
ristian se fije en mí.» Repito por dentro y soplo las velas mi
ya es más de media noche y todos se marchan excepto él, ya que s
a su coctel. —Vámonos a algún sitio a seguir celebrando. — le pido y m
uestros padres. —Franco, Lucia. — dice llamando la atención de mis padres —¿Me dan permiso de ir con Hanna a seguir festejando su cumpleaños? — les pregunta y no pued
jo, vayan tranquilos, eso sí, cuída
nco. — accede y m
lo normal y busco rápidamente mi pe
ojo y el cómo todo un hombre detallista, me abre la
unto emocionada mientras
os hará problemas porque seas menor de edad. — me explica mientras conduc
lumen de la música para disfrutar del camino y
rente a la playa y apenas bajamos del auto, la música ya se escucha desde la calle. Hay m
mientras vamos caminando por e
cerca —hay muchos idiotas aquí y eres mi responsabilidad. — aclara y de inmediato todas mis ilu
y para mi propio mal, son mucho más guapas que yo. —Hanna, te presento a Martin, Malena, Sergio y Alejandro. — me dice
? — le pregunta y mi mirada de inm
a, ojos celestes y bastante volup
e ignora para simplemente tomar
eja sola aquí con estos tres chicos
? — me pregunta
caminar entre la gente hasta que al salir al j
hacia la playa. Realmente no quiero ver a Cristian bailando con esa rubia. Llevo años enamorada de él y ni siquiera voltea a verme, quizás es que soy fea o muy ch
partado y solitario, me siento alejada del mar, d
el plan que tenía para pasa
y me hace rechazar el primer sorbo. Sigo escuchando la música a lo lejos y de fondo suena el tema de moda de los Black Eye Peas, “
sarla increíble y
la segunda lata de Smirnoff Ice y al voltea
— me quejo y me levanto para aleja
r de beber, no estas ac
pero ante mi torpeza, me caigo en la arena haciendo que Cristian caiga so
antar un poco mi cabeza y ser yo quien le bese primero tomándolo por sorpresa —Han
ustas y mucho. — le confieso y vuelvo a besarlo con tanto ímpetu que él no puede más que responder a mi beso y no sé
vida y que parece detener el tiempo —Hanna. — ontenta
al parecer esto hace que no dude más y sus man
u ayuda termino de quitársela dejándolo caer a un costado y él por su parte term
— dice
mis pechos y los va liberando de mi sujetador de encaje color azul al igual que mi vestido. Es la primera vez que un chico me besa allí y
mente en qué momento se ha quitado los zapatos, pero ahora busca algo en el bolsillo de su pantalón y el verle sacar un condón me hace sonreír —Hombre prevenido. —digo y por primera vez me atrevo a mirarle con detenimiento. Es verle desn
as me besa, quiero responder con esa misma intensidad, pero me pierdo en un laberinto infernal que me e
lor que esto causa en mí y s
. ¿es...? —int
ezcla de sorpresa y rabia, él comienza a moverse en mi lentamente. Es magnífico, inesperado y excitante.
temblar y callar mis gritos en su boca mientras que siento que todo empieza y termina aquí y para mi sorpresa él se encuentra igual que yo y mo
elicidad y miedo que siento en esto
go me mira —me debiste decir que... —pronuncia y resopla. —Rayos…Hanna... — se
de saberlo? — cuesti
que... — dice y a
erias tu o cualquiera y ya. — miento y sí, me
—vuelve a decir y me pongo de
y problema. — digo y ya con solo mis zapatos
llama y vol
Qu
e entere de
levas a mi casa o pido
os minutos y puedo notar la in
u despedida un poco más cariñosa con Malena, Cristian y yo vo
realmente la que te gusta. — digo fría cuando ya estamos llegando a la puerta de