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La guardiana de un millonario

Capítulo 4 Un encuentro criminal

Palabras:3106    |    Actualizado en: 19/06/2021

1 –

está muerta — espetó

o seguro de que ya no tenía vida, enton

Tomas Clark Henderson

¿en qué puedo

al gerente inmediat

gún inconve

o necesito que la perso

problema trataré

pueda resolver mi pr

onveniente puede decirme y

de encontrar un cadáver en mi

¿Q

a su gerente y qu

espondió la mujer es

os policiales, el tocó el cadáver su ropa era parte de la evidencia y tenía que aguardar a los forenses. El gerente llegó corriendo a la habitación, cuando abrió la puerta y vio el cuerpo ensangrentado empezó a gritar histérico, Clark trató de calmarlo, si no paraba de gritar todos los huéspedes se e

n tomaré su declaración, por favor responda a

acu

usted a

usted seguro?, tal vez solo

he visto, ten

rsona desconocida e

egué la puerta ya estaba a

qué hora usted aban

salón de eventos de la planta baja, salí como a las

miraba con curiosidad — ¿Cuánd

l ascensor y vine a mi cuarto, cuando la encontré, le

est

ark molesto por qu

usted llegó ella

ue acabé d

sangre…¿se la hizo cuando

e entiendo ¿usted no sa

al respecto ¿tiene us

stro único sospechoso, y hasta que podamos probar lo contrario necesitaré qu

asunto — dijo molesto — quiero que esto quede claro — agregó por si el hombre no captaba

su llamada antes de irnos o si pre

tive para no levantar más sospechas sobre su persona, luego acompañó a los agentes policiales que lo rodeaban como si fuera un criminal peligroso, bajaron por el ascensor hasta la planta baja, cuando salieron a la recepción no podía creer en

¿por qué la policí

o es todo — respondió él inte

ropa está manchada de sangre? — no quiso responder a es

responda por favor

tarios — di

rteros se estaban sacando la lotería con la situación, le tomaron fotos esposado con la ropa manchada de sangre, esto no le podría haber pasado en un momento peor, a tan solo dos horas atrás para esa gente él era un empresario exitoso, ahora lo tacharían de asesino a sangre fría, porque sin duda al

evaron por un pasillo que daba a las salas de interrogatorio, el lugar era deprimente, no tenía ventanas y las paredes estaban pintadas en un color ocre oxidado, el olor a mis

2 -

los asesinatos, ese maldito era muy inteligente, encargaba las muertes y se lavaba las manos de cualquier culpabilidad, solo había descubierto ese dato porque una de las chicas de Carmen lo había escuchado de uno de sus clientes, y el testimonio de una prostituta no era suficiente para asegurar que era culpable, pero ella encontraría la manera de hacerle pagar por sus crímenes tarde o temprano. El método del asesino que contrató era muy preciso, sin duda era un profesional, no dejaba ningún rastro en las escenas del crimen, excepto su sello que era muy particular, asfixiaba a sus víctimas al tiempo que les cortaba la piel para torturarles hasta que se desangraban lo suficiente muriendo lentamente y con mucho dolor, ella había visto cosas terribles en el pasado, pero esto le dio mal estar, la mayoría d

la levantó la cabeza lentamente,

cado y ojos oscuros, una nariz afilada y un bigote que en cualquier otro le parecería ridículo pero que en él se veía exótico y varonil, comprendió porque se había dado un tumbo tan fuerte, su cuerpo era como un muro de acero, ine

r por donde vas

n mis pensamientos — el hombre

3 –

ora estaba un poco roja por el golpe, ella seguía sin mirarle, así que la contempló sin ningún miramiento, tenía unos pantalones de cuero muy ceñidos y una camisa de mangas cortas blanca semitransparente, llevaba un top deportivo del mismo color debajo de ella, desde ese ángulo podía ver la naciente de su busto bien proporcionado, su piel era bronceada y reluciente en todas las partes

tamente, y lo miró directamente a los ojos, una avalancha

él además de hermosa tenía un rostro muy angelical, uno que él no olvidaría sin duda, tenía los ojos aguamarina, le recordaban al mar que tanto le calmaba cuando tenía sus crisis, sus labios lo

la mujer, ella solo siguió mirándole sin expresión, parecía ser impenetrable, entonces cuando estaba a punto de pasarle la mano para ayudar

ió automáticamente de expresión mostrando lo que parecía

tective le pasó la mano y ella se levantó ignorándole totalmente, fue entonces

– Sophie

cho lucir arreglada pero si cuidaba de estar siempre limpia, Wilson

ella lo miró raro

¿po

vez más de forma rápida, él tenía la expresión de un niño que acababa de ser ig

l hombre volvió a sonreírle ¡qué diablos! su es

n gracioso? Sophie se preguntó, luego fue bajando la mirada por su

sted? — le pr

oy Tomás Clark… Henderson… — agregó como si eso lo

ive Wilson — ¿quién es? ¿y por qué está aquí? — él pa

bre que encontramos en la esc

ormalmente mencionaba el apellido Henderson y lo reconocían a nivel nacional por su fama de excéntrico y empresario exitoso, sin mencionar que era uno de los hombres más acaudalados del país y su cara estaba en todas l

Por

a pensó Clark , finalmente a

edes estar

e, que por la posición en la que están puedo deducir que no son de salpicadura si no que de transferencia, sin mencionar el detalle de que si hu

tro único

— agregó dándole a entender a su compañero con total seguridad de que el hombre no era el culpable — hablaremos cuando los analistas me den más datos de l

etective no parecía molesto, más b

cambien la ropa y saquen algunas fotos para e

ospechoso? — preg

apurémonos, debo seguir mi búsqueda

cuando hubo terminado todo el protocolo le dieron algo para vestir y fue a la sala de “entrevistas”, quería volver a ver a la mujer que el detective había llamado “Gates”, era evidente que se tenían mucha confianza, si una mujer como ella llevara el caso sin duda éste se resolvería pronto pensó, no quería verse involucrado por más tiempo en este incidente, cuando la prensa se enterase de los por menores harían todo un festín para sacarle el máximo provecho a la historia, incluso si ahora lo deslindarán del caso ellos no dejarían de mencionar su nombre en las no

za — dijo susurrando mientras ag

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