Entre Fortaleza y Pasión
DE M
la sostuve mientras me levantaba lentamente de la cama. Miré a mi alre
raté de recordar. No pasó ni un segundo
a dejado cada trabajo que estaba haciendo para hacerle entrar en
. Todo se habí
me levantaba de la cama. Vi algunos medicamentos en lo
r qué estaba llegan
ntra las paredes resonó en toda la
iablos est
in palabras. Algunos de ellos se estre
que me dijeron esa mañana. La última vez que la vieron fue con una maleta cuando salió de mi casa. Recuerdo ese día también. Me habí
visé el garaje. Honestamente sentí como si me estuviera volviendo loco. Mi
ducha relajante que no hizo nada para cal
ico de los medicamentos que tenía en mis c
, me puse la chaqueta del
on fuerza el pedal. Había superado el límite de velocidad, pero era lo único qu
ención. Ahora lo
mi asistente en el momento en q
la villa y te apresuré a una clínica cercana antes de llevarte
dijo que no la llamara señora Turess sino señorita Tur
a, mi rabia aumentaba con cada pal
nviar el acuerdo de divorcio, aquí está", colocó el expediente frente a mí. "Lo recibí justo antes
ciega rabia, agarré las hojas de papel y
ás fuera!" Le dije con severidad. Si quiere que fir
ugando exactamente? ¿Se ha vuelto loca? ¿No era suficiente que la dejara quedarse en mi
scuchar esa palabra nu
ura se enderezó y sos
e mis ojos en ella, mi enojo se evaporó hasta cierto punto, pero aún podía sentirlo, todavía podí
la mientras movía sus caderas hacia mí y se sentaba en mi reg
le devolví el gesto. "Has estado trabajando todo el mes. No nos hemos visto en mucho tiempo", su
nte recogiendo los papeles y revolviéndolos.
papeles para poder triturarlos como hice con los ant
gas presionando mis muslos, sus dedos jugueteando intermitentemente con mi cuello y ro
ción de Sydney por llamar la atención y concentrarme en la mujer que tengo en mis brazos en este mo
Mi corazón dio un vuelco momentáneamente y mis labios se es
riño. Sabes qu
lanco, "Siempre debes e
is labios rozaron los de ella en un breve beso. "Enton
o en su lugar. Sus pupilas se arquearon mientras pensaba en lo que quería. "Quiero una
" Levanté
er diseña las mejores joyas. Todas las chicas de los
or de su cintura. "Listo. Me aseguraré
risa y mi corazón se hinchó. "¡G
seguir uno para Sydney también. La callaría y le haría
ndose a los míos. "Este domingo es el cum
ocupada para acomodar la fecha del cumplea
quiero allí. Estoy segura de que papá también", miró hacia otro lado y registró su pequeño bolso que estaba elegantemente sobre mi mesa. De su
que equivalía a más dinero y más dinero significaba igualmente más trabajo. No podía darme el luj
uve. Si pudiera sacar tiempo para asistir a esta fiesta, podría logr
itaba para darle algo de sentido común a la cabeza de Sydney y recordarle que nuestra desafo
unas horas fuera del tra
o y asistiría". Le di un beso e
esperar!" E