ENREDOS DEL CORAZON

modo, pues ella era bastante cuidadosa, mis

es miedo?

or q

staría dispuesto

ríe

o que para este momento podrí

ómo compartim

le dije, en señal

ntigo

es,

ría pasar?

ú eres como

a, era muy menor para mí, y aparte no sería

vez a una estrella

No

portunidad de ver un

e a mi padre —

ñas mucho,

amigo y no verlo

dije a sac

tra edad era muy diferente, pero ella lograba que qui

je dándole la espald

desc

r cuidar tus

valentía, valentía es lo que necesito para decirte lo mucho que me gustas, y no pode

cuando vi que todos se dirigían hacia nosotros

rmieron? — pr

en su

rnos — dijo Alan,

o, ya no como antes de conocer a Jaz

está mi

a sigue

aste con el

sa? Es una n

te v

ti? ¿Cómo dorm

eni

ndose sus audífonos y poniéndose l

rmana? — preguntó

olo que… nad

ermano, su rostro parecía triste, pero yo no podía hacer

s llegado

as — dij

, quitando s

e, todos se ha

asa? — p

iento

or q

er un c

de, ¿po

olvidar a Mariana y perdóname porque sé que a ti te gusta Alan, aunque el haya sid

, no es pro

ugar a otro, quería buscarla, pero no podía por la simple razón de que no somos nada

ntos también, ¿Qué me pasa? Intentar olvidarte es como olvidar lo que soy, es como una herida que toca mi ser, como un e

por fin

mín se ha enfermado

ué t

se enfermó más, el otro día quizás la viste tranquila, pero ella

nsé que estuviera

a en casa, deprimida ya sabes,

tien

éntame, ¿Regresa

— res

dijo

mi pasado, realmente es bastante

razarla y decirle que no está sola, pero no pue

que por fin te ve

no te visto m

ilo, ¿es

upo

qué pre

habías comp

— dije to

que me conocía, a todo

or una

No

cho menos pasas en la casa, siempre anda

a es muy linda, pero también muy joven

tiene h

tiene

joven, pero cuando conocí a t

ella murió muy joven, crecí sin una madre y no he muerto aún, sé

algo — dije, Mari

ro, d

permitirme cono

trañado y a l

a, ¿en qué

o per

e gu

de qu

que salga

nton

chocando su ma

agradezc

lla no muera, así como murió mi abuela, ella murió porque el

ser como esa luciérnaga que te