Amor de cristal

e los acompañaban. Aquella joven era de piel bronceada, cabello oscuro y brilloso, sus ojos, desde mi perspectiva me parecieron de un color verde claro y su vest

zás para distraerla lady Shwarz se aproximó h

lla te has vuelto ¿Pu

u dirección— y muchos

l humor. Debió ser difícil para ti adaptarte al ca

egure—yo más que nadie necesitaba un cambio de ambiente,

ó, pero no supe si debía toma

con la mirada a la bella pareja que parecía disfrutarse mut

olocándose a un lado mío, quizás para poder

n tensas, casi como si deseara que la pieza de baile terminara, como si fuera una tortura bailar con aquella joven, pero al contrario de él, su pareja le obsequiaba una sonrisa triunfal m

hermana—concluí al notar la mortificació

ris Diermissen, él es un ilustre vasallo de mi madre, recibió su título el año pasado por sugerencia de ella. Su familia posee el favor del p

nder que es un obstá

estimación que la reina siente por su famili

ber cuál era el motivo de tal antipatía por esa joven, se

labras me habían dado más dudas que respuestas— Fitzwilliam es un hombre muy orgulloso y suspicaz, debes saber que no le agradan los pretenciosos que rodean a nu

reina había sido prácticamente desestimada por el rey, no sabía que sería de mi pobre herma

la fortuna que hoy en día posee. ¿Tú crees que mi hermano

r algún parentesco con nuestra familia, teni

ente. No despreciara a tu hermana por ese peque

a busca fortunas, Jane no está enamorada del rey, si no de su

eso sugerí la participación de tu hermana, es bella, educada y también ingenua. El ser reina significa que debes ignorar algunos para dar

ue sería elegida como la próxima reina, como la moldearían a su manera para ser lo q

Ser una reina parece más una

manera—declaró con crudeza, ella que habia vivido la mayor parte de su vida en el palacio conocía todo esto y parecía no importunarle en lo absoluto lo cruel que

una flecha al corazón, sin darme cuenta había encontrado otro motivo para evitar que mi hermana se entregara a las garras de la

taba a caminar a nuestro lado para mover su primera pieza en su juego en busca

í el ritmo de aquella melodía y al es

í y yo dirigí la mirada hacia atrás, mi hermana me dedico una última sonrisa c

e su madre y la mía. El rey estaba rodeado por un sequito de seguridad y entre ellos algunas mujeres que miraban con desdén a cualquiera que

d. El rey miro en nuestra dirección y sus labios f

inguida, nunca en mi vida había oído hablar a alguien así, era

n, ellos me han acogido como parte de su familia y sus b

cción las palabras de su hermana, y la expre

ceja, no supe que pensar de eso, quizás había reco

estando tan lejos de la capital. Ambas están en edad casadera y por

la mentira había provocado que el rey dirigiera su mirada hacia mi hermana. Mi corazón salto al notar que el rey la miraba, la examino un instante y

aba mirándome, levante la vista, pero lo que vi me sorprendió. Él estaba observándome como un cazador a su presa, na

hacia mi madre— la belleza de sus hijas es realmente excepcional, no dudo que esta noc

as tienen de nuestra familia. Los hombres de buen estatus social temen acercarse a mis hijas por esos rumores que han man

jeres detrás de él se acercaron un poco para escuchar la respuesta de su majestad

jos de mi madre se iluminaron como zafiros, era como si Dios

embargo, en un movimiento inesperado él se volvió hacia mí y dio un par de pasos

nor de bailar co

miento me impidió ver lo que sucedía a mi alrededor hasta que me vi caminando de la mano del rey hasta llegar al centro del salón. El rey envolvió mi mano con la suya y me tomo de la cintura acercando mi cuerpo al suyo y al compás de la música me gu

ntemente bella para atraer la atención del hombre frente a mí. Levanté la vista al sentir como

tes que merezca tu atención má

n su pecho, no tenía ningún interés en ellas, pero me pareció que era el mejo

curiosa por saber a qué se refería lo mire y él a mí,

or

erlo, pero su compañía es mucho mej

uestionar— cualquier mujer

ué lo c

estaría sonriéndole y yo, s

desagrada m

cil ser yo misma frente a alguien tan importante c

ona más agradable de todo este lugar, incluy

recordé las palabras que Lady Shwarz me habia dicho unos m

mirada—c

en mi mira

che solo he visto falsedad disfrazada de sonrisas falsas y reverencias en donde me ocultan l

sáramos con la mirada. Al poco tiempo la melodía culmino e hice una reverencia protocolaria, para agradecer la pieza

beso que pude sentir a través de la tela de mi guante y cuando se

s llorosos y algo inflamados, signo de alguien que había tratado de soportar un llanto inminente, pero al verme ella simplemente escapo de mí. Cuando

r, perdóname, n

uestiono llena de ira, sacudiendo su b

temerosa, mis lagrimas com

echazarlo. Helena, arruinaste mi vida y

or, escú

nterrumpió mi madre acercándose a nosotras al da

er

lo que digas esta noche, así que por fa

me dejara ir yo en su lugar, pero mis labios no pronunciaro

de llorar—ordeno mi madre severamente. Sus

i padre, lady Shwarz se acercó a mí con un pañuelo listo para l

atrevió a preguntar que me ocurría, debió suponer que se trataba de una pelea de hermanas. Lo que sí hizo fue abrazarme y darme un beso en la frente, froto mis brazos con sus guantes y al ap

aban, pero mientras observaba los bellos vestidos de las damas alzarse en gráciles movimientos me enc