Siempre tú

Estoy como siempre en mi cama, comiendo todas las golosinas que puedo, mi vida ha sido así desde que mi madre murió, odio ese día porque fue el más doloroso de mi vida aparte del de cuando mi abuela falleció, las dos personas más importantes de mi vida se habían ido mientras que yo me quedo sola, sin saber que hacer, nunca he trabajado ni mucho menos he salido de casa sin que nadie me acompañe ¿Y ahora que voy hacer? Me siento tan estúpida no sé que hacer con mi vida, siempre me la he pasado en esta casa siempre al cuidado de mi madre, pero ella ya no está y la herencia que tenía su enfermedad

se lo termino así que ahora debo trabajar y hacer algo pero no sé cómo  rayos hacerlo, por lo pronto debo parar de comer golosinas y tratar de salir de esta depresión, y claro de esta ansiedad que me da de solo pensar que mi madre ya no está conmigo, mis lágrimas se empiezan a hacer presentes en cuanto recuerdo esos momentos felices con mi mamá...

"Flashback"

—Mamá... Después de la preparatoria estudiaré la carrera de nutrición y junto con eso seré una gran escritora—sonrío mientras le platico a mi mamá quien está tejiendo punta de cruz en su aro.

—Si mija lo serás y como primer paso te daré una computadora —saca una laptop de atrás de su silla de ruedas.

Me asombro y con emoción corro a abrazarla.

—Gracias mamá, gracias por creer en mí —le doy un beso en una de su mejillas.

—Yo siempre creeré en tí, soy tu fan número uno —me dice mientras acaricia mi cabello—Vas a cumplir todos tus sueños y serás muy reconocida y yo estaré muy orgullosa de ti.

Fin de flashback...

Mis lágrimas no dejan de salir y es que lo que más me duele es que no pude lograr eso, ya que mi madre enfermo poco después desde ese día dejé mis estudios y solo me dedique a ella y ahora que no está no sè que hacer.

A lo lejos se escucha el timbre y junto con eso el grito de mi amiga más bien mi única amiga la cual es Kristen.

Limpio mis lágrimas y solo me bajo de la cama y camino hacia la entrada de la casa, esta casa y un pequeño finiquito  es lo único que quedó de esa gran herencia que tenía mi madre.

—¡Ay no! No llores de nuevo, Cielo tienes que salir de aquí, ya vas para el año así, por favor Cielo, a tu mamá no le hubiera gustado verte así—me mira con tristeza.

—Lo sé y es verdad por fin me di cuenta de que esto no me llevará a nada, no quiero ser así, no quiero ser el hazme reír de mucha gente la cual solo está esperando a mirarme mal—digo cabizbaja.

—Claro debes salir de aquí, debes buscar tu camino y yo te ayudaré, así que por ahora tenemos que pensar en que debes hacer—se sienta a un lado de mí. 

Han pasado algunos días y para empezar con mi cambio hemos quedado de salir a un gym y después a buscar algún trabajo.

El timbre se escucha y es Kristen quien viene vestida deportiva abro la puerta y en cuanto me ve solo se sorprende y como no, si yo solo me visto tan casual y fodonga como siempre.

—¡No! No, Cielo debes usar algo más deportivo más adecuado para tu edad, menos mal que traigo un cambio más aquí, toma.

Veo el conjunto y es uno muy bonito, tanto que me da pena usarlo ya que estoy un poco pasada de peso no mucho pero si algunos pequeños kilitos, mientras que Kristen es muy cool y muy fresca.

Es de clase alta mientras que yo ahora soy media clase pero no importa.

—Vamos Cielo—menciona Kristen.

Camino hacia el baño y me cambio de ropa y salgo nuevamente.

—Vaya, mucho mejor—me sonríe y me toma del brazo y me encamina hacia su coche.

Ambas después de unos minutos llegamos al gym, el cual es enorme, de dos plantas y lujoso.

—Vamos Cielo—menciona mientras se baja del coche.

—Si mejor vamos a caminar al parque—digo nerviosa.

—Cielo debes empezar a ser más social,  antes lo eras, además este es el primer paso así que vamos—me toma nuevamente del brazo.

Entramos al gym y tal como me lo imaginé es hermoso, ha decir verdad jamás había pisado uno, veo a mis alrededores y es increíble este lugar, la vibra que se siente aquí es increíble, la música, el olor a fresco todo es perfecto.

—Buenos días—menciona Kristen.

—Buenos días—menciona una chica con una gran sonrisa.

—Queremos inscribirnos—dice Kristen.

—Si claro la mensualidad es de $1200 pesos va incluida la inscripción, tenemos clases de yoga, zumba, spinning, natación, pilates, y hay aparatos, contamos con instructores y nutricionistas.

—De acuerdo, nos quedamos—Kristen saca la cartera y después su tarjeta.

—Yo pago lo mío—digo mientras saco dinero de mi cartera y lo dejo en el mostrador.

—Cielo, yo te invite así que yo pago—sonríe.

—¡No! Yo pago porque es mi salud, ya suficiente haz hecho con traerme aquí y ayudarme a salir de mi casa—sonrío agradecida.

—Pero Cielo no debes gastar—suena preocupada.

—No te preocupes que aún no estoy en banca rota—me rio de mi misma—Además estoy por buscar trabajo.

—Está bien pero... Si necesitas algo me dices.

—Okey.

—Por favor pongan sus huellas en el sensor—dice la chica.

Ambas ponemos la huella y después damos nuestros datos.

—De acuerdo,  bienvenidas mi nombre es Brisa, soy encargada de lo administrativo, además de ser cajera,  enseguida les daré a conocer quien será su instructor síganme por favor.

La chica nos lleva a la planta alta y es más hermoso aquí arriba, por fuera hay balcones los cuales están adornados de una manera muy hermosa, hay mesitas y etc, al fondo hay una cafetería y en medio están todos los aparatos.

Brisa nos lleva hacia un chico alto, ojos medianos, pestañas largas lacias, su piel es color blanca un blanco hermoso, es como rosadito no sé no tengo idea como es su piel solo sé que es hermosa, su pelo es entre lacio y ondulado, él tiene un cuerpazo sin exagerar, unos labios mmmm sus labios no sé son como grandes y no... En fin es guapo jamás había visto un chico así, aunque solo es eso un chico guapo.

—Louis ellas son tus nuevas clientas—dice Brisa.

—Brisa tenemos que hablar —menciona el chico y se la lleva a otro lugar.

Y aunque se la lleva, escucho perfectamente de lo que hablan.

—Brisa te dije que no me trajeras a más personas, estoy ocupado tengo mucha gente que entrenar, después entreno yo —suena molesto.

—¿Y a quién quieres que le diga?—menciona Brisa.

—No sé, busca a otra persona—dice para luego irse.

Claro muy guapo pero es un maldito engreído.

—Lo siento chicas, yo las atendería pero tengo dos meses de embarazo así que... No puedo cargar pesado, miren por lo mientras les dare un tour y después lasa pondré hacer cardio en la elíptica y caminadora, después mañana les prometo que tendré a un entrenador para ustedes de verdad disculpen a Louis—sonríe nerviosa.