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Pasión en Bali

Pasión en Bali

LesGia

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56
Capítulo

Laura es una mujer que tras ponerle punto final a su vida monótona con su novio decide ir a Bali junto a su hermana para conocer un poco más del lugar y sentirse libre de toda la mierda que vivió en su relación de cuatro años, ella no busca el amor, realmente no busca nada, solo quiere sentirse libre y feliz, lo logra hasta quedarse hechizada por unos ojos azules fieros y electrizantes pertenecientes a aquel surfista llamado Kilian, aquel que le hace sentir miles de sensaciones y que más que asustarla, lo que hace es hacerle pedir más.

Capítulo 1 Problemas

Es imposible para mí no mirar al hombre que está frente a mío caminar de un lado para otro pasándose la mano por el cabello mientras yo intento no llorar más .

-Laura, por favor, ya hablamos de esto .

-¿Esa es tu gran respuesta para zafarte del problema?, es increíble lo que me estás diciendo .

-No lo comprendes, estamos bien

-¡No! ¡No estamos bien! ¡No estamos para nada bien, por ningún motivo en esta vida! ¡¿No te das cuenta de lo mal que estamos?!

-¡¿Qué no me amas?!- Dice y realmente creo que él piensa que aquello es una realidad .

Nos miramos fijamente hasta que yo tiemblo por dentro y por fuera sintiendo mi corazón convulsionarse y estrujarse dolorosamente, ¿Qué si lo amo? No sé la respuesta y mucho menos después de tantos problemas, por lo que, bajo la mirada desviándola un poco, me da un poco de vergüenza no saber qué responder con exactitud, no quiero mentir tampoco .

-¿No me amas más, Laura?

-Bueno, sí, yo...mmm, te quiero .- De inmediato Nicolás me toma por los hombros haciendo que lo encare .

-Eso me basta, no hay necesidad de decir nada más, eso es suficiente para mí .

-Pero a mí no me basta .- Me suelto sentándome en el sillón para suspirar cansada .- Nicolás, he llegado a mi límite, no quiero seguir conformándome con vivir infelices porque a ambos nos da miedo el cambio, nos merecemos algo mejor que estar juntos por miedo a sentir que nos derrumbaremos si nos separamos.

-Laura... mírame a los ojos, quiero ver cuán sincera eres al decir aquello .

Nicolás se sienta a mi lado mirándome fijamente mientras toma mis manos entre las suyas .

-Sé que no hemos pasado tiempo juntos este año y hemos creado un sin número de inseguridades, yo estoy consciente de eso y ...

-¿Solo este año? ¿Y qué me dices de los años anteriores?-Él hace una mueca de disgusto, ya que, sabe que es verdad, sin embargo, continúa tratando de convencerme de recuperar una relación que ya murió hace mucho tiempo .

-No puedo evitarlo, amo mi trabajo y tú el tuyo, ambos hemos estado ocupados y creí que no estar siempre encima de ti sería lo ideal, no quería hostigarte, pero si necesitas que me quede contigo lo haré, y si es porque no te he pedido que nos casemos, sabes que cuando tú digas que estás lista yo también daré el gran paso, mira, todo lo que hemos construido juntos, ¿Realmente quieres acabar con todo esto? Nuestros padres estarán muy decepcionados con nosotros, somos la pareja de oro, no rompas nuestra burbuja .

Nicolás me señala con su mano nuestro "hogar" que hemos construido con demasiado esfuerzo con el paso del tiempo, trago saliva sintiendo mis ojos llenarse de lágrimas mientras miro todo a mi alrededor, cada objeto y cada decoración que yo misma escogí al igual que los aspectos de nuestra relación, tanto sus gustos como los míos en un mismo lugar, he participado muy activamente en la creación de esta vida de ensueño, pero entonces, ¿Por qué me sentía vacía?¿Por qué siento no encajar con este lugar que yo misma construí?¿Por qué no me veía a mí misma dentro de ella?

En cuanto me abraza me sujeto a él pero apenas su celular suena y él se despega sé que lo único más imposible que irme es quedarme, no necesito más de esta mierda en mi vida, Nicolás se levante para contestar mientras yo tomo mi celular y mi cartera mirando como habla y me mira diciéndome con señas que "Por favor, lo espere un momento" pero yo simplemente no puedo esperar más, ya estoy cansada de ser quién siempre deba esperar, ya estoy cansada de ser quién deba estar en segundo lugar en su vida, es por ello, que voy con él quitándole su celular y colgando la llamada mirando como abre los ojos de la impresión .

-Nicolás, escucha, será la última vez, puedes quedarte con todo lo que hay dentro de esta casa, no me interesa, no lo necesito, solo quiero mi tranquilidad, quedarme contigo sería seguir mintiéndome a mí misma, ya no quiero más de esto, quedarme a tu lado sería como una vieja herida, como un desengaño amoroso al que aferrarme por el placer que nos da lastimarnos y es suficiente, estoy segura de que encontrarás a una persona que quiera las mismas cosas que tú pero esa no soy yo, ya me cansé, ya he tenido suficiente de estas apariencias, Adiós .

Se queda estático mientras yo termino de salir de la casa tal y como llegué a esta ciudad, con absolutamente nada, camino pensando que mi corazón se romperá pero eso no pasa, ya que, hace mucho que dejó de importarme, al contrario, es como si a cada paso que doy la carga sobre mi espalda y mi alma se fuera aligerando, siento que acabo de quitarme un gran peso de encima, no sonrío porque a pesar de que el peso se desvanece, la soledad pasa a tomar su lugar y quiero pensar que aquello es Lorenzol, es la etapa de duelo pero era necesario no seguir en una mentira, ahora sé que no lo amaba con seguridad pero duele, mi corazón duele pero confío con que el tiempo aligerará el dolor que siento .

Sí, me lastima haber terminado con Nicolás pero he llegado a un punto en mi vida en el cual no estoy feliz ni con lo que hago ni con lo que soy, duramos cuatro años juntos y me aterra decir que han sido de lo más miserable en mi vida, él nunca estaba, yo tampoco, a nadie le importa y lo peor es que dejé un montón de sueños y metas de lado con tal de estar ahí, esperándolo en vano, ya que casi nunca llegaba a la hora que debía y yo simplemente me quedaba dormida, o más bien esperándome a mí misma, a por fin decidirme a hacer algo que me lleve un paso adelante a lo que realmente quiero ser .

¿En qué momento me dejé ir tanto?¿Cuándo fue que dejé que mi vida tomara este rumbo? No pienso más, solamente tomo un taxi que me lleve a cada de mi mejor amiga Débora . En cuanto llego a su enorme y bonito hogar me siento bastante fuera de lugar ¿Qué carajos estoy haciendo tocando el timbre de una residencia a las ocho de la mañana de un martes a mediados de primavera? La enorme puerta se abre y quién me recibe es Débora cargando a dos de sus hijos .

-¿Laura? ¡Qué sorpresa! Pasa, pasa, estás en tu casa .

Entro mirando a tres niños pequeños de diferentes edades correr aparte de los que él carga .

-¡Vengan todos, tomen sus mochilas que ya es hora de irse a la escuela!

-¡Mami, ya se nos hizo tarde! Papá se enoja cuando nos mandas tarde a la escuela .

-Si bueno, su papá está de viaje y no tiene porque enterarse ahora vamos, el chofer los espera . Laura, siéntate, dame un segundo que si no los mando fuera ahora se quedan y si Leonel se entera se pondrá como Hulk, es un poco malgenio, pero así y todo es pura miel en la cama, no por nada me ha hecho cinco hijos ya .

Asiente sentándome en el sillón, conmoviéndome y sonriendo al ver a Débora arrodillarse frente a cada uno de sus hijos para arreglarles sus uniformes escolares y sus mochilas, asegurándose de darles un par de consejos de vida y sobrevivencia dentro de la escuela, ya saben, por el posible bulling que puedan sufrir, pero sobre todo me conmuevo cuando los llena de muchos besos y abrazos .

-Recuerden, no dejen que nadie los moleste y si lo hacen, deben demostrarles quién manda, si me mandan a llamar de la dirección diré que son niños extrovertidos, no se preocupen mis amores, tengo todo bajo control .

-¿Enserio, les dices eso, Débora?- Mi amiga se encoge de hombros riéndose junto a mí y los pequeños .

-Papá dice que no debemos pelear pero es porque papá es un blandito .- la pequeña mostró sus puños lista para defenderse .

-Su papá dice muchas cosas, unas buenas y otras... no tanto, solo no se metan en problemas muy grandes y si lo hacen asegúrense de que me llamen a mí y no a él que se enojará con todos, incluyéndome .

Todos volvemos a reírnos mientras ella hace que se despidan de mí para luego llevarlos a la puerta a donde ya los espera el chofer que los llevará, una vez que se van, Débora se queda mirando el camino hasta que por fin suspira y cierra la puerta .- ¿Leonel, está de viaje?

-Sí, pero regresará pronto, dentro de una semana más o menos, si es que todo sale como tiene planeado, pero cuéntame, ¿Qué hay de ti, qué pasa? ¿Ya desayunaste?

-La verdad es que no .- en realidad, no tengo mucha hambre .

-Ven, vamos a la cocina .

Voy con ella siguiéndola a la enorme cocina donde una empleada ya se encuentra limpiando la mesa llena de platitos para niños, me siento dejando que Débora me sirva algo para luego acomodarse junto a mí, sabiendo que ya se dio cuenta de mi cada de pocos amigos, no es que tenga muchos ánimos de reír o sonreír luego de haber dejado una relación estable entre comillas .

-¿Qué hay con esa cara?¿Nuevamente peleaste con Nicolás?

Permanezco en silencio jugando un poco con la fruta con mi tenedor para luego mirarlo, Débora me sostiene la mirada mientras le da un trago a su tasa de café .- Hemos terminado y no hay marcha atrás .- Apenas le digo Débora escupe su bebida, tosiendo hasta que se calma y limpia para luego mirarme impresionada.

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