Me salvaste del infierno

abre pasó entre mis piernas y baja mis pants junto con mi ropa interior, escu

s, nunca imaginé que así perdería mi vi

nto saliera de la iglesia, pero si ella no hiciera ese tipo de cosas a escon

hecha pasión, yo e

chicas abusadas y asesinadas, ahora mi historia será

hombre en mi zona ín

ayude —ayudame se que me he alejado pero no

rece, no logro entender de dónde salió, pero, pronto

l otro se tira de culo en el piso y se empieza

os, por qué la luz me dejó completamente enca

de mi, Dios un animal está cerca d

ndo y mi mirada también se va aco

veo a los chicos que estuvi

ado, es un hombre estoy segura

que lo estoy viendo con una voz muy profund

y desnuda de la cintura para abajo. E

s nec

asa sana y salva Zuleyka.

y como sabe

itarle importancia al hecho de q

ismo me has llamado por mi nombre, tu voz se esc

s han herido mi orgullo —No llenes tu cabeza de pensamientos impuros, no puedo verte

ustando! ¿ere

ad no tienes que preocuparte, te conozco desde que na

o escuché bien lo que acaba de

r en mí a menos de que me vieras, pues aquí estoy presente y te salve debo aceptar que no q

lo puedo

me vieras creerías e

s de su cuerpo se van tornando de un color dorado cómo si fue

n rozando el piso, sus plumas son blancas como la nieve per

ven es más que obvio que si es mi ángel de la guarda, ahora me s

rte avergonzada, ustedes los humanos siempre dudan incluso

ento a otro me vuelvo a poner nerviosa cuand

ro ir

as desobedecido a tu

razones por las

qué has descubierto un engaño pero si no hubieras desobedecido las órdenes q

ubiera c

as que c

tienes una

ecir, incluso ante

la guarda es

s tan des

está m

la tr

llegare

s en mi

ver

sí que aprovecha el viaj

acerca tanto a mí, solo reacciono cuando sie

ren y asciende

aire en mi

n de volar

do ver la terraza de mi habitación, el viaje fue mu

ión por la terraza —m

ocupes aún

que no conozca es

e mi habitación, ahora esque lo puedo ver bien y mi mandíbula cae hasta el piso. De verdad es un

tener esos pensam

si

no pienses en mi

tie

era como hombre. Pero claro que se tiene

jo carmesí y en mi frente puedo

tos me incomodan y aún debo hablar contigo, date prisa — m