Mi jefe se enamoro de mi
jan
salida y no le gustaba quedarse ahí parada en la puerta del colegio por mucho tiempo, decía que se sentía m
n poco retrasados. -Le dije una vez ya estaba adentro de la camioneta, Al
llamar a los otros guardaespaldas para que manejaran las otras cami
lar el laboratorio de cocaína y marihuana que tenía en el sótano. A pesar de que era una traficante, todavía no tenía la suficiente cantidad de dinero como para la m
ijo Elena después de haberse montado en la camioneta y después
sando mucho y se me fue el tiempo, pero lo más importante es que ya estás aquí y que tu m
i? -Me respondió con el ceño f
e tu bisabuela a comer, nos hizo un almuerzo bien rico. -Le re
ela, ya estaba empezando a extrañar mucho su comida. -Me respondió mi hija. Era cierto que me costaba
biente, estaba pensando en decirle a tu bisabuela que se viniera con noso
e mi abuela. Con respecto a lo de mi bisabuela me parece una idea excelente mami, yo me voy a encargar de inten
ñabas mucho y que quieres que se quede unos días más con nosotras en la casa. Recuerda que a ella se le pone el corazón chiquito cuando tú pones tu cara
r a mí bisabuela. -Me
e han gustado para nada, solo para poder conseguir lo que quería. Todavía tengo bastantes cosas que hacer que no me gustan, solo para lograr las cosas que quiero. -Le respondí un poco molesta,
por mí y que mis únicas responsabilidades fuesen ir al cole
para conseguir todo lo que tienes y que todavía te falta, pero entiénde
-Le grite, la cosa que más me dolía y me molestab
¿Sí? -Me respondió con
s hombres lo hicieron también, Elena ni siquiera espero a que el escolta le abriera la puerta de la camioneta, ella sola abrió la puerta y s
ene la niña? -Me dijo mi
licada y no aguanta que uno le siga una o dos cosas del mundo real, pero bueno olvidemos
o mi abuela
horrible y quería comer bastante así perdiera la silueta. Llegué al comedor y