Durmiendo con el Demonio

ian

ste lío, ¡¿por qué acepté esta mierda?! Todavía no puedo creer que Dae

n tonta,

o Daemon Banister?! ¿Estaba ciega? ¿Me puso en algún

ez de aquí? ¿Cuántos años estaré en la

no,

eza. ¡Me odio tanto! ¡Me odio por inv

pensando? —dig

a aquí ahora mismo, pero ¡¿qué hice?! Seguí adelante con esta mal

lgo para él. Ahora lo sé, ¡no era más que una muñeca se

bre de uniforme, abrien

án deja

e extienda las manos, y lo hago… I

o

me —d

sigo por un pequeño y lar

ierda y entramos

bre me lleva a una posición sentada y me saca la esposa de una man

nte segura de que hay gente detr

realment

osada, ¿qué demonios voy a hacer ah

tar a ese bastardo de Banist

as lágrimas que am

e he h

, parece tener la misma edad que Daemon. Tiene la maleta de mi auto en su mano

acerle algunas preguntas, me gustaría que fuera completamente honest

nsigo mismos nervio

bien

beza y abre la maleta, mi mirada

go Daemon

volucrada en el negocio de la droga. Tú… e

ada, ¿qué esp

irse en la cárcel, quiere echar a la b

cabeza en

r, tiene que hablar. —Sus intimidantes ojos m

taba llena de drogas… lo juro —digo

ién creo que le estaba entregando esto a alguien. Necesito saber

uedo venderlo, no puedo traicionarlo… ¿Pero él

ntregárselo a nadie… N

u silla, mirándome de cerca… Una

posición vertical y

s… y debo decir que usted es la primera que es

ntiendo —mie

ijo de Donald

marrones, sus largas pestañas hac

rio Ad

—preg

nta una

amos jugando el jueg

pir

No tengo ni idea de lo que está insin

encubriendo está libre, y t

o en si

podría pasar más de diez años en la cárcel, ¿quiere desp

do cal

te y cierra la maleta, lo coge y s

xima vez, Srta. Chandler, puede ser qu

o puedo dejar que me pase es

re —l

y se vuelve

para hablar?

portunidad de hacer una llamada… Le pr

o pienso que va a negar mi ofert

… Realmente espero que pueda llegar a a

piro se me esc

nico salvador ahora… Él

nces solo tengo dos

y fr

---

na? Mujer, ¡¡¡date cuenta