Mi amada señorita
o, no sabia que responder a la mujer que se iba, se veía dife
na reunión de negocios y ahí se había encontrado con Clara, quien lloraba a mares por que su novio la había dej
su cuerpo le pedía liberación, a demás no podía recurrir a su no
ar con Amelia y decirle que había sido un desliz que nadie lo había planeado, pero ella lo
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a puerta una taza choco contra su frente. Amelia, se sentía aturdida, por e
¿Cómo puedo invitar a mis amigas un café o mínimo un té decente, si tengo una hija inútil que
rabaja para tenerlos" Mariela, se quedó en
diji
nzó a empacar sus cosas, estaba cansada de todo, ya no quería estar ahí, le dolía q
bolso, Mariela quien estaba en la sala, se l
e ha
ngo, con esto tienes para un tiempo, si necesitas más llama a Al
e ayudo a curar su herida, Amelia le pregunto si sabía de algún lugar para rentar, a lo que la chica le dijo que ella buscaba compañera de cuarto, Amelia la espe
mportante, la empresa tenía un nuevo so
arada y tenía su trabajo al día por eso, nunca andaba corriendo como loca,
con traje gris, camisa blanca, y
su secretario, Sebastián tomaba e
a preparar todo era parte de su trabajo, cuando Sebastián entro al l
pero no le di
ido seño
quienes suspiraban al verlo, su mirada cayó en Amelia, quien tenía una tableta en
s al señor Sebastián Turner nu
ron, en ese momento Am
das, se veía muy hermosa a pesar de la tirita que cubría su frente la cual estaba un poco hinchada y con un color morado, se noto que la chica la quiso cubrir
es, y de hablar del proyect
el almuerzo, señor hemos
anesa la secretaria del señor Davis había pedido la comida, le entrego la
le parezca?" pregunto
da, no como picante" D
e" dijo Vanes
Ella ni siquiera se encargo de la comida, la duda se veía en sus ojos
distraída" Dijo Vanesa, tratando de
e ella no era la que había tenido el er