Teach Me Math, Baby

s clases de

ídos lo que escucharon. Él asintió a lo

guntó, algo conf

que yo sé— Le expliqué, p

on la cabeza, aunque no creo que lo haya notado su vista está enfocada en el camino—. Bien

nerviosamente mis manos sobre mi regazo—.

Dice, pero aun así no me convence de que esto no está bien—. Solo tienes que aceptar, no

é se refiere con que "gana

mbio?— Le pregunté mirándole. N

eteó en sus ojos, algo que no me gustaba del todo para ser

.., y yo te enseño otras co

.

asustaba su expresión y la forma en cómo lo dijo. Me estoy ar

entando alejarme de él, pero ya no me era posible

eguro mi cara era de completo te

miedo aumentara significativamente—. Que sientes cuando le ayudas a alguien qu

arme de un infarto e

uceé al no poder art

erme el cuerpo ante el apodo, era algo extraño que

ar una vez más. ¿

ás nerviosa de lo que ya estaba. Giré mi rostro hacia enfrente mientra

algo?—

sema...— Exhal

frente al no confiar en que las palabras salieran correctamente de mi boca, in

imiento no se compara al nerviosismo que sentí la primera vez que actué en público en

que saliera de mis cavilaciones—. ¿Aceptas o no?— Inqui

era podí

rando a que lo notara, ya qu

cha?— Inquirió a lo que yo af

silencio previo—. ¿Te comió la lengua el r

e las cosas que dice y au

sexta casa— Le dije con algo de

abeza—. Ya veo que tu lengua está co

prendí porque esta vez las palabras salie

isculpó alzando amba

pedí, al llegar a la casa

ra y yo me apresuré a ab

do que saliera. Tragué duro al encararlo—.

rque si lo hacía actuaría c

ca y haciendo ademan en salir de su auto. Solo

d al caminar, pero mis zancadas eran muy cortas y la veloci

Me detuve en sec

rabajo y mi papá no nos deposita dinero muy de seguido. Un ingreso extra podría ayud

s con otro sentido y me confunde terriblemente, no me inspira la suficiente confianza aún como para aceptar su propuesta de estar con él a solas por varia

robar el terreno, solo tengo que ocultarlo bien de mi madre y todo estará bien. Solo se

dolo antes de decir—: ¿D

escucharme. Aunque tenga un poco de miedo

contraba fuera de su auto; se a

, tu pon

— Me apresuré a

i hablas rápido ¿

tención que

cen tres por

Dije elocuente en forma

—. Pero el chiste es bajar la cifra, ¿aceptas los tres?— Dijo inquirente. No

l, solo quiero probarlo y ver

— Exhaló—. Ni tú, ni yo, cuatro por hora..., y

clases, cinco días a la semana, entonces, ganaría doce

intenciones tenga, solo sé su nombre, algunas cosas que me contó so

oco de matemáticas, ¿

je con una son

za—. Bien, sabía que aceptaría

con confusión. ¿P

empezamos, ¿

ganas de golpearme por

é hora sales

e— Contesté con un li

no en despedida y se giró dándome la

. Me encaró —¿Irás por mí?

eé un poco antes de negar—. Entonces pasó por t

stes, puedo

lastimada— Dijo observándola. Noté como me miró de arriba abajo lentamente, como si quisiera encontrar a

en— Asentí

emán. Le sonreí tímidamente en respuesta y fue entonces cuando él metió sus manos

uspiro antes de

lguien que me lleva poco más de 8 años, le pida a alguien de quince que le enseñe matemáticas. Es algo que no tiene lógica, no logro comprender por qué me eligió a

abusador o un asesino, aunque no tenga pinta de s

ridad física y mental invaden mi cabeza cada vez que recuerdo todo lo que acaba de pasar en cuestión de poco más de media hora. Es d

*

tas sobre el por qué llegué más tarde y sobre quién era ese tipo que me llevó a casa. Definitivamente no puedo contarle absolutamente nada

idí que no debo juzgar sin conocer así que es mejor que deje de darle vueltas al asunto y simplemente me d

por hoy, ya era hora de irnos a casa, ya era

yo lo espero fuera del colegio. Dijo que pas

yo no acepté solo para esperarlo a él porque había prome

día de ayer no me dio su número de teléfono ni yo le di el mío como para comunicarme con él, todo fue tan rápido qu

, no llegará. Se olvidó de mí, debí supone

da y me dispuse a caminar hacia la parada d

aba un poco porque no la podía apoyar muy bien;

ronca a mis espaldas, esa voz que reconoc

mente hago caso omiso, pretendiendo q

ide, pero sigo ignorándole—.

te, sin mirarle porque ya

y aceleré el paso lo más que pude —. ¿No subirás?— Inquirió a lo que

irándole con mis brazos cruzados a la altura de mi cintura. Noto como suelta una exhalación y prosigue a bajarse de

esa, no quería que pensara que me quedé esperando a que hiciese ese acto de "

en llegar tan tarde debe tener su razón, solo estoy exagerando y

arry cerró la puerta una vez estuve dentro y se apr

r, a modo de disculpa. Yo tan solo me lindé a asentir con la cabe

y por consiguiente p

so, solo se escuchaba el ruido que se c

cosa, como mis manos, mi mochila o tan solo observaba mis pies. No lo mir

o en la cochera. Observé por el vidrio d

s?— Pregunté c

ta, obviando su res

me la puerta. Después de hacerlo, me ofreció su mano para ay

me traji

para salir

jo mientras caminaba h

iné dos pasos hacia atrás en ese momento. Fue entonces cuando me di cuenta de la gran diferencia

as— Habló pausadamente antes de

derablemente ante su acción. Casi puedo esc

ecir—: Estudiar, a e

diota por lo que acaba de suceder. ¿Por q

ción forzada y m

Ordenó. Asent

sa con cualquier gesto que haga provoca que solo asienta

mesa mientras él iba por todo lo necesario para estudiar, no sin a

perarlo. Noté que ya no había tanto desorden como lo había

la mesa, sacó su libro de matemáticas y un cuade

es que te en

u mirada. Nunca antes alguien me había mirado de la misma forma

itiera lo que había dicho ya

tendido las frac

cosa. No se entendió como eso,

empezar con eso

*

no me estás

an complicado

es muy fácil— Habla, con s

rees, entonces puedes decirme

partes tomaste— Contestó, sonriendo ligerame

, ¿y el d

número de partes en q

fin había entendido los conceptos. No sé cuá

tú el denominador ¿no?— Fruncí mi

pregunté d

a— Humedeció sus labios—

n-no te

—. Olvídalo— Negó con la cabeza restándole imp

so?— Insisto, entre curio

— Esclareció—. Prosigue, que

uiero s

pe, acallándome

haya sido su orden o su mirada determinante, solo sentía dentro de mí que

as, o balbuceos y murmullos que no alcanzo a escuchar mientras me mira de esa forma tan... tan... no lo sé, no sé cómo describirlo ya que nunca me había pasado nada p