La invocación de Alana

en tu cerebro,

de l

ermodelo –le dijo Roy Tayler con sarcasmo a Kerry Anne Hamilton, en voz baja, mirando de manera analí

a en el top tres de las más emblemáticas y prestigiosas de Estados Unidos. Su sede se hallaba en uno de los imponentes rascacielos de la Quinta Avenida, en el centro

e comenzó la tarde –prosiguió Roy en voz b

casi en susurro. Luego miró a la muchacha, y le

sta los ocho años. Ya comenzaba su madurez. El paso del tiempo no puso en peligro la lindeza de su rostro de portada de revista, ni las formas de su cuerpo. Ostentaba una cabellera de color rubio platino. Embutida

posición económica bastante holgada, gracias a sus éxitos en variados negocios, en los que contaba con talentosos e importantes socios. Su único matrimonio terminó en un divorci

Su rostro estaba limpio de arrugas. Con frecuencia vivía aventuras con mujeres hermosas, jóvenes y sobre todo,

r se acomodó el cuello de su suéter

me parece muy corriente. Como ella hay

, con tono analítico-. Es alta, tiene rostro fotogénico, buen cuerpo… Sus ojos oscuros transmit

Kerry Anne c

e simpatizó, desde

te-, lo digo porque llevo años e

nton

replicó co

ás que venga de Carolina del Norte converti

mueca, dijo-: Le daremos un chance. Tal vez sea otra versión de Li

uerdo. ¿Qué e

a de mi h

endió ella-. ¿T

e cuando ganó el concurso, La Chica Encantadora –di

hicas tienen dinero para pagar

erda que, de mis numerosos negocios, Tayler’s Model Mana

ayoría de las recomendadas por mí, terminan aprobadas por la junt

te he felicita

o –con cierta sorna agregó-: Luego

una sonri

tiene much

es huérfano

. La chica no pudo aguantar más y se puso de pie. Sintió al

certe una prueba -su

illaron. Extendió los brazos para abrazarla. La agente no espera

n cierta vergüenza. Se llevó las manos a la cara y al cabello-. Perdóneme, es que… es que… He ido

ana. Te entiend

i ustedes no

u entrada aquí depen

-preguntó

o que llamamos la

eba de

tó, sonriente-. Se trat

engo din

pió suavemente-. Esas fotos

n alivio. Kerry

ca seas y de la opinión del f

spiró con notab

n fácil co

-. Acompáñame a mi oficina. Te voy a conseguir una cita con un fotógrafo

ana y la agente se encaminaron hacia la puerta. Antes de salir

emos lu

ó con un movimi