Charlotte

rlo

unos documentos, su especialidad es los números así que debo explotar sus habilidades. Siento como mi presión se sube por todo lo que está sucediendo. El tabaco es lo único qu

én es mi amante clandestino, nunca he tenido una relación y nunca la tendré soy más de disfrutar el momento, de disfrutar a los hombres. El amor y todo eso es

mación? —Él se quit

fueron seis, aunque todos lo niegan, hay dos que están muy nerv

ás pronto salgamos

n unos nuevos socios. Son nuevos en l

r por la ventana, estoy alarm

e ellos quieren vernos,

rdenes? Soy yo quien decide a qu

preciosa. Así que iremos a la bodega y luego, saldremos para donde ellos ¿Te parece?

ue la incertidumb

s ya que allí nos encargamos de torturas. Al entrar, algunos de nuestros hombre

respuesta a lo que sucedió en una de

y eso me desespera más, nadie acept

gar con cada uno de ustedes. —Saqué mi arma y disp

e ver con eso. —Una mujer de unos treinta años s

s para poder conseguir lo que deseo. —Ella se sienta y baja la mirada—. Ustedes no deb

atrevía a decir nada. Mire a Luciano qu

e. —Nadie decía nada, empuñe mis manos llena de frustración, no puedo

s. Algunos gritaron mientras otro

vaya a la cabeza de alguno de ustedes? —Entre todos se mir

ento mucho por no cumplir con mi trabajo. —Me acerco a él, tiene su uniforme de guarda, él tan solo baja la cabeza y pide disculpas ¿Cómo si eso p

e dar dinero por eso, ellos saben que s

orque les aseguro que sus familias son las que saldrán pagando todo ¿Entienden? —Todos asien

ras de mí, se escuchó

nos van a esperar aquellas personas, me da mucha curiosidad que alguien se haya atre

a diario, sino que también debo buscar quien se atrev

listo, en caso que deban abrir fuego y empezar una batalla campal con tal de defende

riosas? es la primera vez que escucho de ellos —le

creer que sean los mismos sujetos del cementerio, lo único interesante es que podré descubrir quienes son—. Pero no te preocupes, tal

esos rostros, en especial el del h

Adicional vas a buscar a la persona que hizo eso creéme que no vamos a ten

pes que las cosas se

asta la bahía, un lugar transcurrido en horas de la mañana, somos privilegiados en usar este lugar, algunos miembros de la policía están bajo nuestras órde

ores en la parte superior de los inmuebles cercanos. Veo como se abre la puerta y salen ellos

r una gran mesa con licor nos esperaba. Todos tomamos asiento, el am

os costados de su cabeza. Luciano arruga el ceño y me mira negando con la cabeza—. Nos dijeron que era una reunión de negocios ¿Aqu

da de que las cosas funcionen. Ahora no me interesa hablar con intermediarios, mis planes son grandes así que les conviene ¿Cuál es el jefe? si es que hay uno. Po

bomba de tiempo, que iba a

—Uno de ellos le hace señas al

el menor. —Él se presenta, su barba de algunos días le daba su toque misterioso, su cu

tanta intensidad que sent

stan los juegos y estas bromas fuera de lugar, son puestas en su

Señala con su mano

endo su mirada poco a poco, gen

ctos en América. Eso puede ser útil para usted mi querida dama. —Sirve dos copas, m

trabajen para mí? —Me acerco a él, baje mi mir

e esto, si desea puede ponernos a prueba. —Él le hace señas a su hermano menor, esté trae un malet

, mientras el verde de

y le aseguro que será un

para luego camin

portunidad. Les aseguro que si fallan no

o salí de allí, bastante curiosa