Destinada a ese hombre

studios no marchaban del todo bien, y su jef

edarse dormida y le llamó la atención frente a toda la clase, un

precio de aquellos profesores que esperaban una dedicación absoluta sólo a los estudios y una disponibilidad para cualqu

rera empresarial seg

ajo de eso y aprendería pa

o "barwoman" la había ayudado a conseguir un lugar sirviendo tragos. Lo único que realmente le gustaba de

había insinuado, y le había rozado

ara un cuerpo como el suyo, lleno de curvas, y los esp

ombre alto y voluminoso, encontraba las excusas para tocar ocasionalmente alguna parte de su cuerpo, sabiendo

tirantes corta y negra que apenas si le cubría el pecho, que siempre tuvo grande, y una pollera que debía ser amplia y a la r

a esa sensación de vacío, y se durmió desnuda y co

se vistió rápidamente con unos jeans y camisa, se preparó en el termo un café bien c

culo pasó de largo y sin llevarla porq

ella entró al aula en silencio, pero su lugar predilec

, mientras el profesor hablaba

nidad de abordarla nunca, ya que Lilian no almorzaba en la universidad,

divinar que no llevaba sostén, el pelo suelto y despeinado... tan distinta de la

u auto, tenía departamento pagado por sus padres y excelentes calificaciones, pu

o sus piernas debajo de esos gastados jeans. Intentó ahuyentar sus fantasías para evitar la palpitación de su

rnos y salir a tomar aire antes de la siguiente materia, cuand

ante alto, y podía verse que hacía ejercicio. Tenía el corto pelo

ntensa de él, mientras caía en la cuenta de la cantidad de tiem

le reclama

erse y salir del aula, pero fue

llegado temprano y ocupado su asiento de sie

ba resuelto a buscarla en el horario del almuerzo, así que cuando l

igo?- la voz de Alex rompió la bu

a... ¿te

-llevamos casi un año c

rtés, es que realmente nunca tengo

respondiste mi preg

seductora sonrisa que tenía enfrente.

igió -Ehm, lo siento, en realidad traje mi almuerzo

buceo- Compro un sándwich y nos sentamos

, está bien,

la acompañó, no quería que se arrepintier

en un banco bajo un árbol cuya somb

edida que agotaron los temas de cortesía y lugares c

riamente a lo que Alex había c

lizar unas diligencias en otra ciudad, así que pensaba dedicar

les, su perfume (¡alerta de feromonas!), y el sol jugando entre las luces y sombras del árbol con ese pelo claro y brillante... de repente no quería que se fuera. Se volvió locuaz, charlando de la universidad, de su tr

ió, con un poco de pudor, que se había humedecido. "Pero si sólo

zo? Era lo primero que solía decirle a las chicas, garantía segura de poder llevárselas a su departamento... y a su cama), y

la verdad, ella huiría. Tras un año observándola y deseándola, algo la conocía. Y no arruinaría la oport

enas anoche había soñado que lamía sus senos, color canela y salpicados de algunos lunares, imaginó sus pezones

nos libros en la biblioteca- la

paba de nuevo,

ecesito unas fo

raron juntos