El Castigo del CEO
que sus padres y su hermana Monique se fueran a dormi
rrison que sucedía en casos de abuso sexual, eso suponía Hanah en caso de que la víctima recordara a su atacante, o el episodio, pero en cambio ella no recordaba absolutamente nada de lo que pasó después de la copa de vino que le ofreció Ares. Hanah miró a su espalda y pensó en salir por la ventana de su dormitorio, pero dado a su terrible vértigo le pareció imposible arriesgarse de ese modo, quería huir de su casa, no quería terminar con el cuello partido en el patio trasero de la casa de sus padres, y aunque debía admitir que había pensado en el suicido los últimos días, pero no era su estilo ser tan cobarde
de paseo nocturno _ dij
un vaso de leche en una mano, y su pijama de conejo puesto. Hanah soltó el aire que t
! _ dijo Hanah supli
yo fuera tú; también me iría, pero haznos un favor a
a voz quebrada, y sin poder evitar que l
o a que se casará contigo. Estas enferma Hanah _ agregó con asco_ Yo merecía ser la esposa de Ares Prokopis, soy más bella, y valgo más que tú, que siempre ha sido un ser insignificante. Con aires de grandeza y superioridad
osas tan perversas, eres mi
que, y le dio la espalda para comenzar a su
victimaria. Pero ya eso no le importaba ahora solo quería marcharse de aquel lugar, y no regresar nunca más como le había aconsejado su hermana. Ya no le quedaba nada que la atara a ese lugar, quizás con el tiempo sus padres la perdonaran
gura que de Ares la buscaría le había dejado claro que no iba a permitir que arrastrará el apellido de su familia con ella, así que tendría que moverse rápido, la boda estaba planeada para realizarse dentro de un mes, así que necesitaba ocultarse muy bien de aquel hombre tan despiado el causante directo de todas sus desdichas. Por ahora solo trataría de llegar cuanto antes a Tomwville el pueblo cercano donde se encontraba la e