The prince's rebellion| Ambrose

SE CR

uques y duquesas, archiduques, infantes, vizcondes, barones, señores y reyes de otros reinos se unie

aburrido estar rodeado de tantas personas, mientras hago el papel del prínc

y Nicholas al unísono en un tono

imo

án que no estás contento al estar aquí.

me nota?—

iz de estar aquí.— el sarcasmo en l

e aquí Ambrose.— fueron

de qué?—

s de ayudarte hermano.

No saben lo que ocurrió luego de

l rey se ha entera

sar que toman tu

, me quedé

bromeando.— d

e trajiste al palacio a esco

que la llevarían a vestirse, supo

cree un escándal

n Elijah.— ag

reo.— re

un corto periodo de tiempo, pues

el centro del salón para iniciar el Vals

segundo

icholas y Elijah para iniciar, a usted lo espera

visarnos Dimas.— dije brin

Nicholas y las gemelas, dieron inicio al Vals, luego les seguimos At

con mi hermana menor, pero esto

aba a que acabara para poder salir del lugar, lue

ues mi presencia

vitados. Atenea y yo nos separamos, pues lo importante era completar la primera pieza, además ella tení

e compara

todos los métodos como para escaparme de un baile, a parte, como llevo tantos años en esto debo decir que

s de la realeza, muchas veces he llegado

cuando abrí la puerta me en

ma

as Ambrose?

ailar, y de esta celebrac

no es así?— volv

rte, me conoces lo s

da vez que quieras Ambrose.— recalcó.—

o con unos guardias detrás de mí como si nece

rose

odernizado, todo es distinto, hay escuelas, institutos y universidades, la tecnología ha av

rose

tiendan que soy un hombre y n

es hora de que lo entiendas. Serás el próximo rey de Zeravla así que ya

corona, no puedo evitar lo que soy y para lo que he nacido, aún así, sé

a vez, sólo quiero una últim

uvo.— De acuerdo, una última vez, pero regresa temprano,

ué.— Sólo debo cam

da más, y termin

isitado lugares, he visto algunas chicas, algunas noches iba al lago detrás del palacio a nadar

ca ha estado de acuerdo con mi rebeldía, aunque me apoyó con algunas escapadas, cabe recalcar que ya

libre sin obligarme a seguir las reglas, pero parece que justo en este moment

uando como un adolescente cualquiera. Aún así sigo harto de

tanto tomé la puerta por la que siempre salgo, es pasadizo que tiene años en el palacio, es lo que usaba la familia real en la antig

a contarnos las historias, por lo tanto la curiosidad me llevó

zando por la otra puerta que se camuflaba entre las paredes. El sol empezaba a esconderse, p

ose de su palacio, e

ocultarme y salir sin problemas, al parecer tenían algo que hacer, por lo tanto el p

a de ahí me hace sentir libre, durante estas horas

a música, había juegos, las personas bailaban, aunque haya pasado la época medieval

omiendo helado y algodón de azúcar, no sabía que el pueblo celebrara estos días, pe

enas, muy alegres y bastante sociables, los puestos estaban llenos de personas, las c

envolvía, me sentía como un chico normal, sin personas haciéndome reverencias, podía ha

bueno de mantener una imagen bajo perfil, es que no tienes reporteros to

lido tantas veces del palacio, pero nunca había estado entre tanta gente, muchas veces salía con mis

cuando de repente alguien se tropez

tampoco muy baja, traía su pelo largo y rizado en una cola, unos shorts y una camiseta holgada, por

helado, sí, estoy bien.— dije observa

darte con

ber

rándole helado a todo el que pase cerca de ella, eso definit

sí que es torpe para

mejor