AMOR SIN BARRERAS.

ÍTU

Gi

ouis marcharse y a Reyyan sali

laba mi herma

por un instante me arrepentí el haber preg

erne lo que

r entrometido e

garró mi mano por debajo de la mesa evitando justo lo que estaba por venir—. ¡¿Acaso tú

rd

mi puesto levantándome, alzó su mano para golp

y te juro Giulio q

se fijamente, siempre había sido así, no tenían necesidad de p

de voz sabía que esta

ma

no a tu padre, o seré yo quien

urré—. Pero lo

ecir tu hermano, así que hablaremos con él

rmuré c

se dirigió a mis he

espondieron

e mi mandíbula, ella sabía que me costaba ho

, alcancé a ver un atisbo de sonrisa y una

sient

e a mi habitación, pero la p

Cannes, Giulio? —me

tenía que darse

dic

undida y cruzándose de brazos—. Se

e mentirle en la cara cuando ya sabía la ve

estúpido? —cuesti

s que estuve en Cannes?, quedamos en que quitarías los maldit

pasado que dejamos atrás, que intento dejar atrás todos los

que me dijeron era verdad, entonces mi papá…mon dieu

ueramos —cité aquellas palabras que me di

después.

to del día donde compartíamos juntos, pero cada uno

ave, lo que me alertó. Aparentaba estar muy calmado, pero por

miramos co

me la culpa. Aunque siempre era el responsable, esta vez no era así—. Sé

o bebé

sus codos en la mesa para después entrelazar sus manos—. Alguien ha borrado l

? —Preguntó Alison—. P

culpaba, Alison observaba su teléfono, Ava estaba tensa en su asiento, se veía un

Cinco minutos me mandaran el vi

levantó su vista observando fijamente a Av

ien? —preguntó preocup

sse —ll

recordé que tenía un trabajo

e te ayude? —

e estar muy cansa

eo? —pregunté curioso—.

rohibido, pero... lo hice porque Reyyan —sonrió maliciosamente al pronunciar su nombre, Louis casi

randemente, tod

a tal punto en que casi me

uis cortó lo que sea

ás que a nadie en esta mesa que entre Reyyan y yo no hay absolutamente nada y que jamás vo

tió inmed

a mentira? Sé cuándo uno de mis hermanos mentía, y sabía

stionó mi melliza, siempre tan

Estaría necesitando u

qué l

esarías a Reyyan teniendo novia, no eres d

e, Alison asintió sonriendo—. Joder Louis,

ó para nada darse cuenta que su

el momento —se levantó y su mirada se dirig

n poco c

ermosas con un beso en la mejilla y un asentim

o que lo afectaba y más cuando siempre habíamos sido cariñosos

dos en su cama, se creó un silencio acogedor. Miramos el techo y sonreí al recordar que usualment

—inquirí e

r qué

espondí— este no eres tú Lo

lencio, cuando estaba por pr

ivido y lo que me falta, si con es

ieres dec

e siempre me sacri

nté ráp

acías en

golpe mirándome d

ido ir allá? ¿Qué te pasa por la cabeza? —Hizo un gesto con su mano

s a ti mism

vuelvas a ese

é tú puedes

o los tienes, así que mientras no los tenga

o de nuestro padre, así que tambi

lo que me dejo entre sorprend

rás? Necesitas a mamá y

los n

a su mandíbula obligándolo a verme, lo obs

s hacer, te estas drogando —se so

a, estoy perfe

levas sin dormir Louis? —pregu

n gesto de protección. Siempre lo hacía cuand

se rompió al escucharlo, él no s

te? —musité con m

e cuatro días, hace cua

a pared, una furia con una impotencia me llenó—. ¿Por qué haces toda esa mier

osos—. Es difícil, toda mi vida lo ha sido. Si

. Tu eres mi guerrero, tú eres mi ejemplo a s

e de algo…de algo de mi vida, y eso desencadenó demasiadas preguntas y respuestas que duelen