La Venganza del Mafioso
tana golpeaban el rostro de Amara - Hasta que por fin abr
ra, que tenía un ligero
egó en su totalidad a la rubia de ojos verdes - Vas a entrenar, no quiero una mujer débil, serás la mujer del Mafioso en una semana - Con aquellas pala
y por ti, pienso que incluso la muerte es mejor que estar en manos de ese hombr
e escaparme de él, yo estoy segura de que lo
versidad vamos a lograrlo- La respuest
que la idea de su hermana era descabellada, pero escapar de la Univ
s accesorios que por supuesto eran necesarios para entrenar con armas, Amara se los coloco, t
tenía el cabello rec
lidad será tu segundo nombre desde este momento - Alexander parecía molesto, pero en el fondo hast
in dudar la agarró del brazo ejerciendo un poco de fuerza en ella -
ue claramente no quiero - El Labio inferior de Amara tembló y aquello suced
z - Alexander tenía la ira impregnada en su perfecto rostro, Amara por inercia retrocedió, s
ra Mendoza- ambas manos del hombre se po
mara sus pequeñas manos tembla
ar a tu dueño - El hombre la agarró de la barbilla,
ás adentró - Reflexiona tus actos y entregame el celular - La voz de Alexander cada vez era más aterrador, Amara esta vez si se sentía chiquita ante él, la h
las cosas Amara Mendoza, por que soy tu peor pesadilla, si así de buena te tengo un final doloroso
alvo logró que el apuesto h
ba que Alexander parecía
más, y que si tiene a una mujer solamente será para el sexo, el creó las Reglas del Mafioso: Mujer - Amante y Esclava, un Mafioso puede tener 3 mujeres y
necesito te busco - Alexander no le dio tiemp
a mucama, logrando
oz de la mujer ten
palabras de la mucama dejaron sin rastros de sangre el rostro de Carol, ella sabía que anoche Alexander mantuvo una reunión de negocios, pero
ción de Amara, evidentemente su había rastro
ía, la nana de Alexander
ba a punto de perder la cordura de solo imaginar
itaciones no es de tu incumben
e por qué involucrarse en sus asuntos y quién venga en la casa mucho menos debe s
der regresó la casa, está estaba en to
n la voz de Alexan
las estaba en la casa, pero que no le haya visto d
de mi despacho- Re
itió se te ocurre encerrarle justo ahí.- la mujer sin
grafía de Julia fue lo primero que entró en su campo de visión, pero paso de largo, luego de estar preparado para acostarse, por un momento
enen una casa para el frío, quizás y solo quizás Amara ya habrá aprendido a respetarlo. El hombre se le
ierda - Alexander la cargó rápidamente y la sacó, estuvo tentando a llevarla en su habitación, pero no, Amara para él no estaba califica
razones de tu venganza, pero no vayas tan lejos, quizás con el tiempo las heridas sanen, ella no tiene la culpa de nada
lo que le sucedió a ella, esta equivocada tú eres la única culpable de que el amor de m
omparado con lo que tengo planeado