ESTÁ EN TUS OJOS
on nadie mi furia porque el responsable seguía ahí adentro, y si no quería perder mi trabajo,
bros y salí enojada. Eran ya las 9 de la noche, me había quedado una hora más trabajand
minar, quería olvidar y así, poder despejar mi mente de todo lo que había p
do. Hasta llegar a pensar en lo que ha sido mi vida en general, veinticinco años que llevaba respirando en este mundo, a veces cruel, a veces compasivo, me habían enseñ
motivación de la primera ilusión, el alma que quizá no es el destino pero es el cam
era invisible. No pasó de un par de saludos en un principio, después que me romp
mis propias historias románticas donde yo vivía esos amores genuinos que ya no existen en la vida real, comencé a escribir primero historias cortas
en conocía al director de una editorial no muy grande en ese tiempo, mi maestra no dudó en a
o. Había logrado trabajar en el lugar de mis sueños pero, no era suficiente para mí. Aún no había conseguido publicar al menos uno de todos los libros que había escrito. No entendía la razón po
dez salió desde el fondo de mis pulmones. Era mi hermano,
soo?! -Le grité sin
¿por qué tan molesta,
a casa? -Pregun
stillas de res fa
que llegue si no quieres m
en un rato nos
día o noche de mala gana, todo lo malo me pasaba así que, simplemente me dediqué a mí misma unos escas
iguiendo era un poco fuera de lo común para mí ya que había chicos que acostumbraban beber hasta el amanecer en este lugar, las calles siempre habían sido solitarias y oscuras pero era la única manera de llegar m
dos provenientes de ahí. Mi corazón se aceleró pensando lo peor, me detuve, los sonidos se esfumaron, había escuchado como si botellas de vidrio cayeran, estaba a punto de continuar mi
egunté casi
luz logré ver a un hombre, se estaba sosteniendo de uno de los contenedore
e él, él no me miraba, estaba agachado, se quejaba, cargaba un guitarra en su espalda, era un chico de pelo largo sostenido
arte? -Pregun
él se dejó caer de rodillas sin darme la mirada, fue ahí
yudar! -Exigí. Su cuerpo temblaba at
dejó de quejarse y yo no podía quitarle la
on presa a los míos, tenía una mirada fuerte, su rostro estaba pálido y ni eso quitaba las perfectas líneas que lo componían. Sus labios se entreabrieron haci
untó después de un
mandó señal de desviar mi mirada ya que yo misma parecía no poder h
mí. Sin palabras, sin agradecer, sin mirarme después de l
sta. Era un maleducado, ni siquiera se dignó e
en tan solo unos segundos de misterio. Levanté mis libros despu
e llamó I Jin-sun no I Jin-ri,
recordarlo, llegué a casa. Lo primero que vi fue a Jun-soo
e?! -Grité alejando el rec
ción de esperarte?! -G
egundo tazón de costillas que
nde lo
ta que yo me haya
n-sun, yo no tengo la
nos tan rápido como pude, quité mi estorboso abrigo y tomé las costill
A c
z y demás comida que había comprado. Comencé a comer como si nunca l
! -Preguntó con la b
e sarcástica si
estaste tan salvaje, aunque de ti n
l mismo probl
irector de
Quié
así, también quizá encontrar ayuda en la auto-publicación, quizá tengas más suerte. -Dijo restán
famosa aquí en Corea y sé que si insisto un p
lo mismo siempre, así
de tema,
babas de salir de tu trabajo, acaso, ¿te viniste
¡No,
por ahí, esconde los peores bares ahí d
intentado ayudar hacía no mucho, él no parec
? -Llamé s
quieres
a agrupación de chicos que estén
e preguntas eso? Creí que ese
lo p
ste a un chico así y te gus
ente queriendo hablar por lo que yo
ué estás roja? -S
s raras p
arto a trabajar-. Se levantó limpiándose la
é qui
o alguna histor
s, ¿po
da en la vida real que involucr
-Contesté d
uzcas algo a
s buscando
llegue a ti, házmelo saber. Esto
uscas exa
alguna historia que involucre el nombre de I Jin-ri házmelo sa
or qué ese no